Pruebas combinadas en Pinamar

Una clínica de primer nivel tuvo lugar en el Polideportivo.En distintas especialidades, jóvenes atletas acompañados por sus entrenadores se capacitaron durante cuatro jornadas.

El fin de semana pasado se realizó en el Polideportivo Municipal una clínica de pruebas combinadas de atletismo a la que concurrieron 70 atletas de distintos puntos del territorio bonaerense. Los jóvenes asistieron acompañados por sus entrenadores y la actividad se llevó adelante, de manera intensiva, a lo largo de cuatro jornadas.

Guillermo Chiaraviglio, quien fuera cinco veces campeón de salto con garrocha y en una, ganador de decatlón, fue el encargado de dirigir la clínica.

“Yo soy el responsable de las pruebas combinadas, el decatlón y el heptatlón, en la versión Mayores, que son las pruebas olímpicas del programa atlético de todo el país. Entonces, hace dos años que hemos implementado campamentos de desarrollo para jóvenes que tienen aptitudes y que demuestran ser aptos para todas las pruebas, no solamente por biotipo, por condiciones física y demás, para desarrollarse en esa disciplina; después, haciendo un desarrollo multilateral; después, si siguen en pruebas combinadas o explotan en un área, salto, carrera o lanzamiento, cuando son más grandes los derivamos; pero en la base hacemos que aprendan todas las pruebas, que aprendan a lanzar, a saltar, a correr, que tengan un desarrollo armónico desde el punto de vista motriz y físico, y eso es a través de las pruebas combinadas. Hacemos unos campings de tres días, más o menos, donde vemos todas las pruebas, las carreras, los saltos, los lanzamientos que componen el programa atlético; solamente le lanzamiento de martillo triple no se ve; después, los tres saltos y los tres lanzamientos, y las carreras de velocidad, vallas y algo de medio fondo, que son componentes de las pruebas combinadas”, ilustra el entrenador.

El atletismo está compuesto por carrera, salto y lanzamiento; la carrera va desde los cien metros (la más corta) hasta la maratón (la más larga): “Después tenemos cuatro saltos y cuatro lanzamientos: el salto largo y el triple, que son los horizontales; y el salto en alto y la garrocha, que son los verticales; y los lanzamientos son los largos, jabalina, disco y martillo y lanzamiento de la bala, que es considerado lanzamiento corto”.

El sistema apunta a detectar talentos. Uno de los caminos son los Torneos Evita, destinados a la captación, y se inician con los torneos locales, para luego pasar a una instancia superior al disputar los zonales, como paso previo a los provinciales. Ya en la instancia nacional, compiten los mejores. En muchos casos, estos jóvenes han sido detectados por el profesor de educación física. De no evidenciarse en los Torneos Evita, es muy difícil poder detectar a un atleta, ya que no hay clubes de atletismo exclusivamente y de esa forma se disipa la posibilidad.

“El deporte le abre la cabeza a todo el mundo porque le permite viajar, le permite tener interrelación con chicos de otras provincias, de distintas realidades, y le brinda la posibilidad y le da la perspectiva de que se puede mejorar, con esfuerzo, con sacrificio; crea hábitos alimentarios, de vida, etc. Yo soy un defensor acérrimo del deporte; es una herramienta extraordinaria que tiene la educación física de nuestro país, que tan venida abajo está, y creo que se puede hacer mucho, pero son decisiones a veces políticas, de currícula, que por ahí se va perdiendo y lamentablemente el profesor de educación física es el único responsable del desarrollo psicomotriz de nuestra sociedad y, si no se dan bien en la escuela primaria y secundaria, llegan a la universidad, no hay mucho deporte universitario muy masivo sino son los clubes que cumplen esa función y a estos les cuesta mucho mantenerse. Tenemos problemas. Entonces, yo creo que hay algunos programas, hay algunos proyectos y la política ha entendido que el deporte es una herramienta muy útil para sacar a chicos de la calle y darles posibilidades de una actividad continua, de llenar su tiempo libre o de ocio”, describe.

Chiaraviglio es consciente de que hay un retroceso en la educación física de los jóvenes y remarca que es la única forma de poder contener a los chicos.

“Si nos remitimos a las mediciones mundiales, podremos ver que no estamos como estábamos hace 40 ó 50 años, en que Argentina era una potencia mundial”, concluye.