Para tomar conciencia: el 58% de los argentinos tiene sobrepeso. Una alarmante situación en una sociedad en donde se venden cada vez más alimentos ultra procesados, estos tienen ingredientes que derivan de productos como aceites, grasas, almidones, azúcares, y otros elaborados mediante el procesamiento de componentes alimentarios o bien se sintetizan a partir de otras fuentes orgánicas.
Más allá de su profesión de nutricionista (FASTA), Natalia Zagurak también se anima a hacer tele, donde mediante una columna de su especialidad brinda consejos y recetas, que apuntan a la línea de lo saludable para mejorar nuestros hábitos alimentarios.
“La falta de tiempo a la hora de hacer las compras, cocinar, preparar los alimentos y organizar las comidas semanales, sumado a que muchas madres que antes estaban en casa haciendo las actividades domésticas ahora han salido a trabajar y cada vez vivimos más rápido, todo esto hace que no encontremos el espacio para dedicarnos a la elaboración de los alimentos”, asegura la experta a la hora de referirse al vértigo de la vida moderna.
Para Zagurat la clave es la organización sumada a la voluntad, ya que considera que lo industrializado, la comida rápida, el delivery, puede ser una solución de momento, pero no para mantener un estilo de vida; en las familias donde todos trabajan o cuando no vive solo, lo ideal es planificar las compras, aprovechar los días que no se trabaja y freezar la comida ya elaborada.
En el momento de hacer las compras Natalia nos recomienda: “Ir al origen de donde todo proviene, verdulería, dietéticas, pescadería, carnicería. Tenemos que despertar y saber que la industria alimentaria lastimosamente los últimos años nos ha bombardeado con productos llenos de químicos y sustancias que nos llevan a tener problemas de salud, obesidad y sobrepeso. Elegir siempre para nuestra alimentación los cereales integrales, muchas verduras, frutas; más ahora, en verano, aprovechar las frutas de estación, que son las más saludables, y lo mismo con las carnes, las legumbres; tener un hábito de consumo y no comer solo dos o tres grupos de alimentos”.
Otro de los riesgos a evitar son las tentaciones en época de vacaciones, momento en que se dispone de mayor tiempo libre, muchas horas de playa y tentaciones por doquier que en muchos casos se convierten en una rutina, donde facturas, churros, pochoclos, productos con mucha grasa o azúcar se vuelven los alimentos diarios.
“Una opción para no caer en estas tentaciones es armarnos nuestra heladerita, llevar tuppers con fruta cortada, sándwich de verduras con pan integral, en lugar de mayonesa untar con hummus, un puré de garbanzos condimentado, rellenar con lechuga, tomate, pepino, queso fresco, palta, o ensaladas, zanahorias o apios cortados en tallitos, frutas secas, que son muy saludables, contienen omega 3 y nos dan mucha saciedad. El tema es qué cantidad comer, porque son muy calóricas. También va a depender si somos deportistas, si somos hombre o mujer; no se puede estandarizar una porción para todos por igual”, recomienda.
El cambio incluye cuidarnos a la hora de salir a comer afuera. Si estamos siguiendo un plan saludable de alimentación, las mejores entradas siempre son las verduras. La panera no está prohibida, pero hay que respetar las cantidades. También está contemplada la copa de vino, en ocasiones como una cena afuera: “No es lo ideal consumir a diario si uno desea descender de peso, ya que el alcohol tiene muchas calorías. A la hora del plato principal podemos optar por alguna carne con guarnición de verduras o ensaladas, también pasta con tomate, albaca y oliva, no con crema y queso. En el caso de los postres siempre lo mejor son las frutas. Uso reducido de sal. Y, fundamental, beber mucha agua, entre litro y medio y dos por día”.