329 femicidios de mujeres de entre 16 y 21 años en los últimos 9 años

Los datos surgen del último Informe de Investigación de Femicidios de Argentina, llevado adelante por La Casa del Encuentro, que además arroja otra consecuencia estremecedora: de esos femicidios quedaron 125 niños y niñas sin madre.

El Observatorio de Femicidios en Argentina Adriana Marisel Zambrano, dirigido por la Asociación Civil La Casa del Encuentro, realizó un análisis sobre los femicidios ocurridos en mujeres de entre 16 y 21 años en Argentina. Los datos fueron tomados de los Informes de Femicidios realizados por el observatorio durante los últimos nueve años, con el objetivo de poder evaluar aspectos particulares de esta población. Los principales datos que arrojó el informe son 329 femicidios en el rango de edades entre los 16 a 21 años, de los cuales quedaron 125 niños y niñas sin madre (de éstos, más de la mitad es menor de 2 años). En la mayoría de los casos el femicidio fue perpetuado por ex parejas, pareja o novio de la víctima, pero en el 21% de los casos no existe vínculo aparente entre la víctima y el femicida. La metodología, en el 47% de los casos, fue balearla o apuñalarla, asimismo con un alto porcentaje de indicios de abuso sexual. Y, entre otros datos, resulta también notorio el número elevado de suicidio posterior del femicida. Del mismo informe se desprenden análisis y estadísticas adicionales que también aportan claridad a la problemática y una de ellas es la que muestra que un llamativo número de femicidas proviene de las fuerzas de seguridad. Este análisis fue presentado por Ada Rico, presidenta de la ONG La Casa del Encuentro y directora del Observatorio de Femicidios en Argentina, durante un evento desarrollado por Fundación Avon en Londres. Allí, en un panel de expertas locales e internacionales, se presentó también una encuesta elaborada en el Reino Unido por la ONG Refuge a jóvenes de 16 a 21 años sobre sus percepciones respecto de la violencia psicológica. Tanto la encuesta realizada por Refuge, como el análisis elaborado por el Observatorio Marisel Zambrano, permiten identificar una situación de alerta sobre esta población joven. Según la encuesta elaborada por Refuge a un total de 500 adolescentes del Reino Unido, el 56% de esta población sufrió violencia psicológica y el 39% de los encuestados considera que la violencia psicológica se ha convertido en algo normal, que sucede en 1 de cada 4 relaciones de pareja. “Hacer un análisis sobre la población joven permite observar y comenzar a entender que si bien hay patrones comunes y repetidos en la violencia hacia las mujeres, los comportamientos difieren según el rango de edad. Es decir, hay patrones que se destacan, que son característicos de algunas edades y no de otras. En este sentido identificar los patrones comunes en los femicidios de mujeres jóvenes puede y debe ayudarnos a pensar en profundidad cómo abordar la problemática en esta franja de población”, comentó Ada Rico. La problemática hoy genera la mirada atenta de toda la ciudadanía y la mirada profesional nos muestra que es un problema estructural de la sociedad, que debe ser abordado desde todos los ángulos. Desde el Estado primero, con prioridad en presupuesto para políticas públicas reales y concretas, concientización y capacitación a funcionarios, legisladores, jueces, fiscales, abogados, operadores de la seguridad y salud, instituciones todas, con prioridad en las educativas, hasta llegar al núcleo familiar. Lo mismo con los medios de comunicación, que algunos parecen recién despertar en la materia y caen en la metodología de contar hasta el último detalle del femicidio atroz jugando a vender morbo. Estos informes estadísticos, en cambio, nos aportan el conocimiento necesario para saber en qué cancha estamos parados y cuán grande es el rival. Luego de ello, seguir un plan de acción sin menospreciar ningún detalle, acá sí. Debe ser nuestro compromiso como Estado y sociedad, sabiendo que educar a los más jóvenes es brindarles herramientas para prevenir y ayudarlos a construir otra historia, no la misma que estamos escribiendo lamentablemente hoy en Argentina.