Casi con el pan dulce en la mano, finalmente se rechazó, aprovechando un sorpresivo tecnicismo, el pedido de aumento de más del 50% pedido por el Ejecutivo.

El lunes fue la primera convocatoria a asamblea, en la que se vieron los discursos más acalorados. Ya antes de siquiera dar lectura al decreto, la concejal Marcela Uhrig tomó la palabra para aclarar que no se han cumplido los requisitos estipulados por la Ley Orgánica de las Municipalidades, por lo que la asamblea es nula y, en caso de continuar, se elevará la denuncia al Honorable Tribunal de Cuentas.

La respuesta no se hizo esperar. Camila Merlo argumentó sobre el cumplimiento de los requisitos, y dijo que, en todo caso, si así lo consideraban, hicieran la denuncia donde corresponda, dando un primer puntapié hacia el quiebre entre ambos flancos. La concejal Alejandra Apolonio, por su lado, propuso que se continúe con la asamblea, mientras que el mayor contribuyente Javier Grispino pidió que se realice un nuevo decreto de convocatoria.

Sin escuchar demasiado lo que se decía alrededor, se dio lectura al decreto de convocatoria, 1. Expediente Nº 4123-0891/02 Cpo. 2 Alc. 5 - Modificación Código Tributario. Proyecto de ordenanza.

Inmediatamente, antes de que nadie propusiera mucho más, Apolonio mocionó que se votara el proyecto tal cual había sido enviado por el Ejecutivo, es decir, con un aumento inmediato a $20, otro en abril a $21 y otro en septiembre a $22.

Desde la oposición, Gabriela Ferretti mocionó una contrapropuesta, tal y como viene haciendo Propin en los últimos años, estableciendo un aumento del módulo a $17, otro en abril a $18 y el de septiembre a $19, por lo que la tasa no llegaría así ni al piso propuesto por el Ejecutivo. Además, pidió que esta vez cambiaran las cosas y que se cerrara el presupuesto, ya que en 2019 se trabajó con un presupuesto abierto todo el año.

Después, se sucedieron las alocuciones. Apolonio apoyó el aumento propuesto enumerando las obras realizadas por intendente, Martín Yeza, amparándose, además, en el respaldo de más del 50% que recibió el intendente en las últimas elecciones. Roberto Elorz apoyó la posibilidad de un equilibrio con un aumento más medido, como el propuesto por Propin, reclamando que hoy entre todos se les paga los sueldos a aquellos que se “vendieron” pasándose de partido por un cargo o puesto en la Municipalidad. Sin dar nombres en la banca, las descripciones hablaron por sí mismas, ya que la referencia era clara, aludía al propio fundador de Propin, Martín Viotti, hoy director de Legal y Técnica del Municipio, y de Juan Artusso, antes luchador de los derechos de los vendedores ambulantes de playa, acompañando una lista de la oposición, y hoy empleado en el área que, justamente, fiscaliza la venta en playa.

Después, le tocó el turno a Laura Vigliecca, quien denostó las “maravillosas obras” defendidas previamente, aclarando que más allá de eso está la realidad que la gente vive día a día; además, como ya es costumbre, ancló su reclamo en el panorama nacional y provincial, afirmando que hoy existe una “catástrofe social y económica en la Argentina, producto de la política de Cambiemos”. En conclusión, la concejal comentó que no acompañarían ninguna de las dos propuestas y mocionó el congelamiento de las tasas. Luego de esto, el bloque de Frente de Todos se levantó junto a sus mayores contribuyentes, seguido por los de Unidad Ciudadana y de Propin, dejando sin quórum la asamblea. Se esperaron los 30 minutos de rigor y luego se dio por finalizada.

En función del fracaso de la primera convocatoria, se hizo un nuevo llamado para la mañana de Nochebuena. Esta vez, la asamblea se conformó con las ausencias de los mayores contribuyentes Cox, Scandizzo, Maximiliano Santini y Gabriel Santini.

Tras la lectura del decreto de convocatoria, Gabriela Ferretti reiteró la moción emitida el día anterior, con un incremento inmediato a $17, otro en abril llevando el módulo a $18 y finalmente un aumento a $19 en septiembre. Laura Vigliecca volvió a pedir un congelamiento de las tasas hasta el mes de marzo para luego trabajar en conjunto en un incremento que le sirva al Municipio pero que tenga menor impacto en el bolsillo de la gente. Dijo que nada había cambiado desde la asamblea del día anterior.

Después, el mayor contribuyente Grispino hizo mención a la mayoría necesaria para aprobar un incremento de tasas, es decir, la mayoría absoluta de la asamblea, advirtiendo lo que sucedería después. A continuación, se sometió a votación la moción de Ferretti, que resultó desaprobada por 17 votos negativos y los positivos de Elorz y Ferretti.

Luego, se sometió a votación el proyecto del Ejecutivo. Resultó desaprobado, puesto que sólo se lograron los 14 votos del oficialismo y se requeriría la mayoría absoluta de la asamblea para su aprobación, es decir, 15 votos, según lo expuesto por Grispino. Con dudas y sorpresa de parte del oficialismo, se dio por finalizada la asamblea, que dejó sin aumento al Ejecutivo, aun contando con la mitad de los votos, en un fracaso con el que de seguro no contaba al comenzar el día.