Por el equipo de comunicación de la parroquia Ntra. Sra. de la Paz
Previo a las Pascuas, los viernes santos de todos los años celebramos en la explanada de la Iglesia Nuestra Señora de la Paz el Vía Crucis (el camino de la cruz) viviente, al igual que se acostumbra hacer en parroquias de todas las diócesis. Es un recorrido de los momentos más sobresalientes de la Pasión y Muerte de Cristo: desde la oración en el huerto hasta la sepultura de su cuerpo.
Pero el sepulcro no es el punto final de la historia y ni siquiera la mañana de la Resurrección, sino que se extiende hasta la efusión del Espíritu Santo y su actuación maravillosa.
En los 50 días que van desde el Domingo de Pascua al de Pentecostés, el círculo íntimo de Jesús lo acompañó, con una gratitud y un gozo inimaginables, a transitar triunfante el camino de gloria, que comprende catorce estaciones siguiendo los relatos evangélicos, que también incluye la venida del Espíritu Santo.
Como dice el Catecismo de la Iglesia Católica, “el día de Pentecostés, al término de las 7 semanas pascuales, la Pascua de Cristo se consuma con la efusión del Espíritu Santo que se manifiesta, da y comunica como Persona divina”.
Y así como las etapas del Calvario fueron convertidas en oración e invitan a meditar la etapa final del paso de Jesús por la tierra, surgió una devoción reciente para complementar el Vía Crucis, el Vía Lucis, “camino de la luz”, que se recomienda en el Tiempo Pascual y todos los domingos del año que están muy estrechamente vinculados a Cristo resucitado.
La filial local del movimiento apostólico Schoenstatt eligió este sábado 14 de abril para organizar en la capilla de Cariló una jornada alusiva que se inicia a las 9 con una oración y meditación, luego almuerzo y culmina a las 14 con la oración del Vía Lucis, una convocatoria que también sirve de oportunidad para atraer el espíritu solidario de la grey católica regional y que se materialice en una ayuda para sostener la misión de la Iglesia en todo el Partido de Pinamar.
En tal sentido, el sorteo de la 27° edición de la rifa parroquial, del sábado pasado, coronó un nuevo ciclo de la activa colaboración con la labor pastoral que la comunidad realiza todos los años a través de ese medio, por la que el padre Marcelo Panebianco expresó su agradecimiento en la página web www.parroquiapinamar.org, donde se consignan las actividades y los horarios en todas las capillas que integran Nuestra Señora de la Paz.