Vivimos una época en la que la mujer lucha por sus derechos y sus espacios de expresión. Ninguna disciplina deportiva desconoce la magia de su irrupción, que deja en cada participación la impronta de género, tal cual se evidencia en cualquiera de los papeles que le toca desempeñar.

Regina Andreozzi es integrante del equipo de las Brujas del Club Social y Deportivo Pinamar, más conocidas como “las brujas del verde”, y recibe a Pionero acompañada por Rocío Cantero y Milagros Caloni. El lugar elegido para el encuentro no es casual, se trata de Tata Bakers, en la esquina de Valle Fértil y Constitución, un cálido espacio donde los pinamarenses y público en general han encontrado el ambiente necesario y lo mejor en panificados, sándwiches, cafetería y menús del día.

“A mí cuando me llamaron y me dicen ‘hay alguien que las quiere ayudar’, dije ‘paremos acá’ porque hoy en día la palabra ayudar no existe. Realmente es muy importante la mano que nos va a dar el dueño de casa, Rolo Pappaterra, porque en el Partido de Pinamar el futbol femenino está en una gran incógnita, ya que no se completan los equipos y la Liga Madariaguense [de Fútbol] no dio el ok, si va a comenzar o no, y nosotros no queremos dejar la actividad”, asegura Regina.

El primer objetivo es no dejar de jugar, no dejar de fomentar el hecho de divertirse en base al fútbol, no dejar de generar encuentros. “Más que nada para eso, para que el fútbol femenino siga vigente no solo en Pinamar sino en toda la costa, estuvimos haciendo amistosos en Mar de Ajó y Villa Gesell. Se nos hace difícil porque no tenemos ayuda y hacemos todo a pulmón”.

Por su parte Rocío agrega: “La mayoría de las nenas salen tarde del colegio, tipo 6, entonces si no tenés una buena iluminación es bastante difícil. Tenemos la suerte este año que en el Polideportivo pusieron las luces y que tenemos la colaboración del club, que nos presta la cancha, pero la verdad se hace muy difícil, más si no tenemos la respuesta de la liga, que es lo más importante para nosotros, que el año pasado tuvimos el gran éxito de salir campeonas en el torneo de ida y vuelta y después subcampeonas”.

El torneo contó con la participación de los equipos del Club Pinamar, San Vicente, Nuevo Amanecer y Los del Clan. Como ya es habitual, el transporte es uno de los temas a resolver, máxime en el caso de las alineaciones locales, que no cuentan con transporte oficial para poder movilizarse.

“El año pasado nosotros salimos campeonas en Gesell y tuvimos que alquilar el micro, pero tuvimos la suerte que nos apoya mucha gente, la familia, y tuvimos mucha participación de ellos”, repasa Rocío. A lo que Milagros agrega: “Por ahí se le da menos importancia pero el buen fútbol y la idea de lo que genera, que se cree que se da solamente en los hombres, todos los equipos de fútbol femenino que estamos acá lo queremos y estaría buenísimo como sociedad que la gente se acerque y nos den el espacio para mezclarnos con el fútbol masculino porque no somos diferentes, jugamos al fútbol de la misma forma y lo podemos hacer de igual a igual, no es que por ser mujer jugamos menos o no podemos pegarle a la pelota”.

Regina retoma el diálogo y manifiesta el deseo de todos y es que haya más inclusión en el deporte y menos niños en la calle: “Qué mejor que eso, volver a los viejos tiempos en que se jugaba entre amigos, no importaba el género, era la pelota, los buzos como arcos. Las Brujas es esto, la pasión por el deporte, de venir y divertirnos y representar a Pinamar y representamos también a nuestras marcas amigas que nos acompañan y ayudan, como Tata Bakers o la Cooperativa de taxis”.