Tras un conflicto que se extendió por más de 11 años, el municipio tomó posesión de dos balnearios que estaban judicializados y procederá a demolerlos.
La Suprema Corte de Justicia de la provincia de Buenos Aires falló a favor de la municipalidad de Pinamar en el marco de un conflicto judicial por dos balnearios que llevaba más de 11 años. Se trata de Cabo Blanco y Pinamar Golf, las dos últimas estructuras de hormigón del frente marítimo que ya están bajo posesión del municipio y serán demolidas.
El intendente Martin Yeza lo anunció en las redes sociales tras recibir la resolución de la Suprema Corte el miércoles pasado. “Ganamos en primera instancia de Dolores, ganamos en la cámara de Mar del Plata y ganamos en la suprema Corte”, escribió el jefe comunal, sobre el conflicto judicial que había iniciado en febrero de 2010.
Tanto Cabo Blanco como Pinamar golf habían impuesto medidas cautelares al intento de terminar con los balnearios de hormigón, una política de saneamiento del frente marítimo que nació en el 2009 y que fue continuada por el intendente Yeza cuando asumió en el 2015. “Hace 6 años que activamos las causas judiciales para ganar y recuperar lo que le pertenece a los pinamarenses”, precisó el funcionario.
“Cabo Blanco tiene más de 600 metros subterráneos que eran para depósito de vehículos náuticos y vivienda para trabajadores de verano, y más de 400 metros de superficie en la planta visible”, describió el jefe intendente, y sostuvo que a partir de ahora inician el proceso para la demolición de ambos edificios. “El espacio subterráneo impide la reconstrucción del médano costero”, señaló.
Tras quedar firme la sentencia de la máxima autoridad de la Provincia, el municipio evalúa si se le da continuidad –en el caso de Cabo Blanco- a un proceso licitatorio o si el espacio será utilizado para playa pública.
Fotos: Municipalidad de Pinamar