Organizado por el Ministerio de mujeres, géneros y diversidad de la Nación, finalizó con éxito el primer foro federal participativo para construir un plan nacional contra las violencias de género. Es el primero de ocho encuentros programados a lo largo de todo el territorio Argentino. El objetivo final es crear un plan nacional contra las violencias por razones de género, pero concebido por las mismas mujeres que militan la causa en los barrios, en las escuelas, en las agrupaciones o instituciones, etc.

El jueves 13 de febrero más de 500 mujeres se juntaron a pensar, debatir, contar y proponer ideas para afrontar las falencias del Estado en materia de género durante tantos años. Integrantes de organizaciones políticas, sindicales, académicas y sociales intercambiaron conocimientos, experiencias y proposiciones, con la escucha atenta y los apuntes de quienes organizaban. “Estamos iniciando un proceso histórico en Chapadmalal y nos da mucha alegría, porque entendemos que este Plan nacional contra las violencias por género, no tenía que ser pensado solamente desde el poder ejecutivo sino con la participación real de las mujeres de la sociedad civil”, aseguraron las organizadoras del encuentro.

Los ejes centrales fueron prevención, asistencia integral y fortalecimiento de la justicia, también de las redes comunitarias para protección y la importancia de la interseccionalidad para diagramar políticas públicas acordes. Respecto al último punto, incluyó un abordaje importante sobre las comunidades de migrantes (integración y análisis de sus realidades), mujeres indígenas y rurales (la falta de acceso a la propiedad de la tierra y la explotación laboral), también la problemática de aquellas que se encuentran en el sistema penitenciario (el 60 % están presas sin sentencia firme) y las mujeres en situación de trata (fortalecer redes para combatirla de forma implacable).

Participaron del evento varias generaciones que, como en cada encuentro feminista, intercambiaron conocimientos y vivencias con un profundo sentido común. Todas las voces se hicieron oír con respeto, cada una aportó su experiencia. “Desde este movimiento impulsamos la pluralidad, no hay una voz mandante, charlamos y pensamos juntas sobre diferentes estrategias con el mismo fin, prevenir la violencia, insistir con la ESI (Educación sexual integral) y seguir unidas desde este feminismo que nos impulsa a actuar cada día. Hubo mujeres que aguantaron 50 años de violencia calladas. Ahora, cualquier piba tiene una amiga feminista que le hace ver si el novio no la trata bien”, expresaron algunas jóvenes participantes del encuentro.

“Hay una re victimización constante de quien sufre, hay Comisarías de la mujer que son solo durlock, no cuentan con los recursos o los gabinetes. Hay gente que no conoce los protocolos, gente sin preparación, se desconoce el rol del acompañante, el acceso a la justicia no está garantizado, etc” , fue el relato de Anahí, por ejemplo, quien tuvo que mudarse de provincia por el hostigamiento que padecía por parte de su ex pareja. Su relato, como el de miles de mujeres en distintos casos, revela una realidad compleja, la ineficacia del sistema.

Surgieron criterios en común, desde la declaración de Emergencia nacional que prevee un presupuesto extraordinario y otro adicional para casas de refugio para albergar mujeres con hijos/as, fiscalías especializadas en género, la necesidad urgente de estadísticas oficiales, crear las áreas de la mujer en cada dependencia, promover cooperativas de trabajo, fomentar el desarrollo económico para la autonomía, la propiedad de la tierra para mujeres campesinas, etc. Se habló, además, de humanizar las carreras de Medicina y Derecho, pero también la Policía, organismo que debe cuidarnos.

Estuvieron presentes algunas mujeres representantes de organizaciones locales, como Mujeres al Frente y Mujeres del Mar que integra la Red Regional de Mujeres. “Nos sentimos muy entusiasmadas porque ahora podemos expresar nuestro trabajo en redes comunitarias. Que un plan de acción de gobierno se realice teniendo en cuenta a quienes estamos involucradas a diario, habla de una modalidad que las mujeres venimos gestando hace años. Y no dudo de que ésta es la forma que impulse un cambio real en las tomas de decisiones en todas las políticas de Estado. La fuerza de la unión de mujeres da mucha esperanza! Aportamos la más amplia diversidad de ideas y podemos decir que el Ministerio es de todes!” es el resumen de la profesora Fabiana Gómez, docente y miembro de Mujeres del Mar del Partido de la costa, quien viajo junto a compañeras de la agrupación Mujeres al Frente de Pinamar. Por su parte, Gabriela Cucuini, integrante de la misma, reflexionó sobre “el desafío de de - construirnos, construirnos y empoderarnos juntas en Pinamar, donde hay mucho por modificar aún para romper con mandatos y desnaturalizar la violencia machista institucional sobre todo. Hace tres años que empezamos esta tarea y la idea es crecer, aprender y participar activamente”.

Ante un sistema de desigualdad estructural que lleva siglos de historia, encontrar las respuestas para equilibrar la balanza no es tarea sencilla. Los ítems fueron extensos y serán sistematizados para la construcción del nuevo plan contra las violencias, que será presentado a mediados de año.

Al avanzar en el análisis, es inevitable caer en la cuenta de que la sociedad toda necesita adquirir perspectiva de género y educación emocional, para comprender y ejercer la equidad que hace falta y poner en valor los derechos humanos. Las mujeres ya lo saben y el plan está en marcha.