El proyecto del nuevo edificio de la municipalidad

Se emplazaría en el predio ubicado frente al cementerio, y aglutinaría las oficinas del municipio, el Concejo Deliberante y distintas cooperativas.

La gestión de Martín Yeza empezó a poner funcionamiento el proyecto para mudar del centro de la ciudad algunas oficinas de la municipalidad y el Concejo Deliberante a un nuevo edificio. El lunes pasado se avanzó en la idea de crear un “nuevo centro cívico”, en la que también se sumarían algunas cooperativas de la ciudad.

Sobre final de 2021, el propio intendente había anunciado la intención de vender el actual edificio donde funciona la municipalidad -ubicada en avenida Bunge y Shaw-, y utilizar esos fondos para construir una nueva estructura, que reúna a la mayoría de sus oficinas dispersas en el centro, y al Concejo Deliberante.

Tras presentar el proyecto en una reunión de gabinete ampliado el lunes pasado, el secretario de Planeamiento, Ariel Galera, dio detalles de la “Gran Manzana”, el anteproyecto que aspira darle forma al nuevo centro cívico de la ciudad.

“El centro cívico es una de las acciones necesarias, y que ya esta en proceso. Hay que empezar a trabajar en los anteproyectos y la forma para que se materialice”, manifestó Galera, quien indicó que -al margen del valor nostálgico- “los edificios actuales dejaron de ser funcionales”.

De esta forma, se planificó trasladar las oficinas a la Gran Manzana, una estructura moderna que se emplazaría en un predio verde, recortado por las avenidas España, Sarmiento y Del Parque (frente al cementerio). “Este lugar no es solamente donde van a estar los edificios sino también se convoca a las cooperativas”, anticipó.

El proyecto
La Gran Manzana es un conjunto de edificios diferentes unidos por un gran anillo, que busca generar una plaza de encuentro en el centro. Alrededor se elevaría la nueva estructura municipal (con 550 metros), el Concejo Deliberante (con 330 metros) y las cooperativas.

“El edificio es un concepto: una plaza, acompañando la topografía y respetando la vegetación natural. Son de Pinamar y para Pinamar, por lo que la idea es ser lo más respetuosa, no pasar la máquina, no llenar con hormigón, no hacer grandes edificios que después no terminan de ser el reflejo de la ciudad en la que está”, sintetizó Galera.

Forma de trabajo
La intención es solo mudar las oficinas del edificio ubicadas en Shaw, por lo que las oficinas de Hacienda, ubicada en Valle Fértil, seguirían en el mismo lugar. Sin embargo, en la nueva estructura se modificarían los formatos de trabajo.

“Cada secretaría va a llevar que cada secretario y director estén en contacto todo el tiempo. El edificio de Shaw es el que entra para poder vender y poder construir parte del nuevo edificio. Es el edificio de Shaw el que pasa al nuevo centro cívico”, aclaró.

También aglutinaría las oficinas de Planeamiento, Obras Particulares, OMIC (Oficina Municipal de Información al Consumidor) e Innovación, que actualmente funcionan en distintas direcciones.

Según el secretario, en el proyecto también esta pensado evitar un desplazamiento de un lugar a otro: “Probablemente se deba pagar todo en el edificio de Valle Fértil, sino estaríamos generando un problema mayor del que tenemos”, sentenció.

Etapas
Con la aprobación de vender las instalaciones del Concejo Deliberante -una demanda que también había sido avalada por concejales de distintos bloques-, el municipio busca avanzar con la ordenanza que habilitaría la venta del edificio de Bunge y Shaw.

“La primera etapa fue mostrar la iniciativa y el proyecto mediante en el gabinete ampliado”, declaró Galera, quien aceptó que todavía no hay fechas estipuladas. “La idea de esta gestión es iniciar el proceso y ojalá podamos hacer la toma de posición del primer edificio”, concluyó.