El pasado fin de semana las playas de Necochea fueron el escenario de un escándalo que, por donde se lo mire, invita al análisis y la reflexión sobre los derechos de cualquier persona a tomar sol en la playa sin cubrirse el torso; “hacer topless” le llamamos en Argentina para el caso de las mujeres. El hecho ocurrió en plena tarde de playa, cuando tres mujeres adultas tomaban sol sin la parte superior de la malla, y se vieron embestidas por un despliegue policial que terminó en una acalorada discusión entre policías (de ambos géneros) y las mujeres en cuestión. Se movilizaron alrededor de 20 agentes de la fuerza de seguridad en seis patrulleros. El video del hecho se tornó mediático y desató la polémica sobre esta práctica en Argentina y la magnitud del despliegue policial. Los agentes justificaron su proceder con motivo de una denuncia anónima por “exhibicionismo y contravención a la moral y las buenas costumbres”, luego las amenazaron de cárcel y, finalmente, las tres mujeres se retiraron de la playa. “No es nudismo, no estoy provocando a nadie, tengo derecho a tomar sol sin cubrirme el pecho, como los hombres; lo hago siempre. Esto es machismo”, dejaron en claro antes de retirarse con el acompañamiento de muchos testigos. Luego de la difusión que tuvo el video en las redes sociales y los medios de comunicación nacionales, varias organizaciones impulsan una convocatoria para organizar un “tetazo” en el Obelisco como modo de protesta. “Igualdad! La única teta que molesta es la que no se puede comprar!”, proclama la invitación lanzada por la asociación Agitaciones contra El Acoso Callejero. La protesta está prevista para el próximo 7 de febrero a las 17, bajo el lema “nuestros senos no deben ser censurados”.