El vecinalismo se prepara para trabajar en dos frentes

Por un lado, la actividad legislativa al inicio de un nuevo período de sesiones ordinarias y, en segundo término, un año electoral que se presenta difícil.

El tema del Sistema Alimentario Escolar no pasó desapercibido para ninguno de los actores relacionados con su implementación. Propin también hizo sentir su inquietud ante una medida que pareciera no trasparentar otros intereses.
Recordemos que por iniciativa de la gobernadora, María Eugenia Vidal, una docena de municipios confiará el delicado tema a sus municipalidades quitándole esa función a los consejos escolares. En lo que respecta a Pinamar, nunca hubo inconvenientes que no sean salvados por los integrantes del Consejo Escolar local. Maximiliano Santini, concejal de Propin, destacó que tras la asunción en el cargo de presidente de Flavia Porres se pudo acomodar lo más atrasado, que era el pago a los proveedores.

“En Pinamar contamos con dos escuelas de doble escolaridad, o sea, con almuerzo, y pese a todo se le da la merienda y el desayuno y eso lleva una logística y una planificación interesante y esperemos que el cambio no traiga problemas”, afirmó.

Al respecto, el edil vecinalista amplió detallando su inquietud: “Lo que más nos preocupa es que la burocracia o que el tiempo de resolver situaciones desde el Municipio es distinto al que termina utilizando el Consejo Escolar todos los días. Esperemos que no impacte sobre el servicio, que para muchas familias es importantísimo, y que no sea una acción política. Recordemos que el Consejo Escolar está integrado por tres consejeras de Propin y una consejera del oficialismo. Entonces desde un primer momento es que hay una intención de desprestigiar al Consejo Escolar. Esto de formar la Secretaría de Educación cuando no es necesaria; no hay una escuela que sea municipal en Pinamar; o sea, no necesitábamos una secretaría. Además del gasto que nos genera, la intención a veces es otra y lo que busca es eso, es terminar llevándose laureles que le corresponden a otro sector y llevarlos para su quinta”.

Mientras el oficialismo ya ha comenzado a calentar los motores de la campaña con su clásico timbreo, el vecinalismo aprovecha el receso y recorre dependencias municipales preparando, además de su estrategia electoral, el trabajo del año.

“En las dos presidencias que tenemos en nuestro bloque en las comisiones Presupuesto y Legales, ayer terminamos de acomodar los expedientes que llegaron para saber cuáles saldrían en la primer sesión, para la cual falta porque todavía estamos a más de un mes. Hay muchos que se lo toman de vacaciones. Para mí es una falta de respeto no estar, no estar para la comunidad. Hay que estar para ir ganándole al tiempo y al trabajo. En el año se ven comisiones que siguen acumulando expedientes y otras prolijas, como las nuestras”, agrega.

Si bien el dirigente ha hecho pública su postura de no participar en las elecciones de este año, es evidente que va a ponerle el hombro a su partido y por supuesto va a fogonear las posibilidades de mantener o superar la cantidad de bancas que hoy ocupa su tendencia.

“Yo creo que las elecciones legislativas van a demostrar el enojo de un gran sector del electorado. Muy pocas veces el Ejecutivo puede mantener un caudal de votos porque quien gana las elecciones, por lo que vimos, es en base a falsas promesas que no se pueden cumplir y, cuando la gente creyó en esas palabras y después ve que la respuesta no es la esperada, siempre tiene una parte de voto castigo. Siempre se busca una renovación, se busca gente nueva. Creo que va a ser una elección donde se va a buscar una renovación en el Concejo Deliberante y esperemos que Propin pueda hacer una gran campaña y alcanzar el objetivo, a largo plazo, que es volver al Pinamar que tanto amamos y que nos movilizó a generar esto”, concluye.