La relación entre la municipalidad de Pinamar y la provincia de Buenos Aires empezó a desgastarse con la administración de la pandemia. Desde entonces y hasta ahora, hubo cruces -algunos fuertes- entre las autoridades bonaerenses y las locales por distintos temas.

Con el comienzo de la temporada pandémica del 2021, el intendente macrista Martín Yeza había tomado una postura “aperturista”, distinta a una provincia gobernada por el Frente de Todos, y desencadenó una serie de acusaciones cruzadas entre ambas administraciones.

Ese mismo año, la diferencia de criterios en torno al manejo de la pandemia se trasladó al inicio y continuidad clases, cuando la provincia suspendió provisoriamente la presencialidad en las aulas por el aumento de casos de Covid.

Yeza había pedido una excepción para Pinamar por tratarse de una ciudad en la que el virus afectaba “de una forma distinta”, pero fue denegada en reiteradas oportunidades por el gobernador Axel Kicillof, hasta tanto la ciudad no logre bajar el índice de contagios y acceder a una nueva fase.

Meses más tarde, el municipio acusó a la administración bonaerense de intervenir y cortar el giro del descubierto del Banco Provincia que ayudaría a la gestión de Yeza a pagar en tiempo y forma los sueldos de empleados municipales, quienes en varias oportunidades cobraron su salario desdoblado.

Las expresiones del intendente no cayeron bien en Provincia, y se abrió un fuerte cruce entre el jefe comunal de Pinamar y quien por entonces se desempeñaba en la jefatura de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco.

“Cuando sos un inútil que ni siquiera podés pagar sueldos, es fácil poner la culpa en otro”, había contestado Bianco, quien ahora ocupa el cargo de Jefe de Asesores de Ministros.

Durante todo ese año, Pinamar también denunció la quita de patrulleros que le correspondían al partido, e inició una campaña -encabezada por el propio secretario de Seguridad Lucas Ventoso- para que le “devuelvan los recursos al municipio” y así poder “combatir la inseguridad”.

Y, recientemente, en la previa de esta temporada estival marcada por la afluencia turística y un rebrote de coronavirus, la gestión municipal también se quejó por escasez de recursos que la Provincia aportó para afrontar el rebrote y detectar posibles casos.

Ministros y autoridades bonaerenses desfilaron durante los últimos meses por comunas vecinas y solo tomaron contacto con Pinamar mediante reuniones con representantes de cámaras empresariales.

De hecho, fueron los mismos empresarios locales quienes actuaron como nexo para recomponer “un vínculo fluido” entre ambas administraciones. “En el medio de esta pelea estamos todos nosotros”, dijo el presidente de la Asociación Empresarial Hotelera y Gastronómica (AEHG), Pedro Marinovic.

Sin embargo, en la reunión de este martes sólo estarán funcionarios bonaerenses, las cámaras empresariales de Pinamar y las cooperativas Telpin y Calp, con la finalidad de evaluar las consecuencias de la tercera ola de la pandemia y el desarrollo de la temporada de verano.

Tras el encuentro, se llevará a cabo una conferencia de prensa (desde las 18) en el Hotel Del Bosque, y contaría con la presencia del gobernador Axel Kicillof -no confirmado-, la vicegobernadora Verónica Magario, y los ministros Augusto Costa (Producción) y Nicolás kreplak (Salud), entre otros.

Aunque aceptó que en un principio no recibieron una invitación formal para participar de la reunión, Martín Yeza dijo que “no es necesario que nos avisen, me imagino que recibiremos la invitación y sí estaremos ahí para recibir al gobernador y a su equipo”.