“Están destruyendo a la clase media”

La titular de la entidad que nuclea a la clase comerciante local ve con preocupación el futuro del sector al que representa. Nota que hay una gran cantidad de viviendas en venta.

María Cristina Malegni es presidente de la Cámara de Comercio de Pinamar y una vecina de larga data, además de ser una persona comprometida con la realidad local. Luego de una temporada con baja rentabilidad, percibe que, si bien la afluencia turística ha sido importante, no llega incidir en las ventas.

–¿Pinamar es más caro o tiene mejores productos?
–Es más caro porque la presión es muy grande: la nacional, la provincial, que este año ha sido muy duro con el revalúo, más las tasas locales, que son altísimas. De hecho, veo que hay muchas propiedades en venta en Pinamar y eso me alarma, porque en muchos casos son gente que tiene su casa aquí y que está vendiendo sus propiedades porque no puede sostenerlas, porque los costos son muy altos, no las puede disfrutar. La gente vende por muchos motivos. En un momento querían vender porque Pinamar estaba muy feo, no era el Pinamar que ellos habían elegido. Otros no lo pueden sostener, porque hay casas que son de muchísimos años, que sus propietarios están enamorados del lugar, que quieran venir pero que no pueden sostenerlas. En donde vivo yo, que antes era unifamiliar y ahora es multifamiliar, pero en donde sigue habiendo casas, que por ahí tienen 60 años o más y que pagan tasas de 2700 pesos mensuales, es una cifra… Además, no es lo único que hay que pagar. Se ha achicado el bolsillo de la clase media, que es justamente el motor de la economía, por lo que no podemos tener expectativas sobre la próxima temporada y además nos espera un largo invierno.

–¿Cuál es su lectura como presidente de la cámara?
–En cuanto a lo que se viene, creo que el consumo va a bajar. Desde el 2015 para adelante, gradualmente, fueron bajando las compras en los supermercados. Y, en otro orden de cosas, si bien aquí no tenemos referencia porque únicamente tenemos un shopping a cielo abierto, en Buenos Aires podemos ver en los pasillos centrales locales vacíos, y estoy hablando de las primeras marcas del país. También podemos verlo en otros, la rotación permanente de las marcas porque no hay ventas. Y que el comercio no funcione no significa que el comercio cierra, también implica que pierde el dueño de la propiedad. La sensación que tengo es que se trata de una cadena regresiva, el que sigue soportando y el que sigue peleando por sostenerse es el que es propietario del comercio, porque para el que tiene que pagar un alquiler es muy difícil.

–¿El gobierno municipal podría ayudar?
–Sí. Haciéndolo un poquito más fácil. Esto de pedir aumentos desmedidos, de echar gente, es una línea que viene desde arriba, y es lo que están haciendo a nivel nacional. Se están equivocando. Están haciendo un gobierno para ricos y los de la clase media somos los que pagamos las consecuencias. Me da como la sensación de que quieren dos clases bien definidas y marcadas, que es una modalidad en el mundo, pero con otro orden, porque, por ejemplo, en otros países el jubilado vive con dignidad y acá se la han robado. El objetivo es que el trabajador cada vez gane menos, para empobrecer las clases. No quiero meterme en el ámbito político, pero uno tiene muchos años y fui viendo el accionar de algunas personas y de los empresarios y no podíamos esperar que esta fuera la otra cara de la misma moneda, son las mismas prácticas.

–¿Te defraudó Macri?
–Sí. Lo vengo siguiendo desde que era empresario, muy joven, con sus negocios con el Estado. Mirando desde, ahí no pensé que iba a pensar en un gobierno inclusivo. Están destruyendo la clase media, que somos la mayoría.

–¿Cómo ves a Martín Yeza en esta tarea de complacer a quienes lo votaron y su seguimiento a un gobierno nacional y provincial?
–No creo que sea él el que esté gobernando; es la cara visible, pero creo que hay una bajada de línea que tiene que obedecer y lo está haciendo a rajatabla, tal vez por inexperiencia no está tomando decisiones más localistas, como por ahí lo está haciendo [Esteban] Santoro en Madariaga, bajo la misma bandera política. Pero, bueno, no quiero ser crítica de alguien a quien no voté y a quien cada vez que le pedí audiencia (como institución) no me la dio. Si esas son las prácticas, se las respeto. Es llamativa esa reticencia a mostrarse públicamente en los últimos tiempos, porque hay mucha gente enojada y desilusionada con el intendente. Porque si le han puesto el voto en el 2015 y en el 2017, deberían ser un poco más sensibles ante el pedido de la gente. Hay mucho malestar. Los comerciantes y hoteleros han renunciado a su rentabilidad, les han pedido austeridad, pero después les han subido todo lo demás, incluso han generado más tasas. Conozco a muchos que pagan todo adelantado porque saben que después no pueden.

–¿La cámara intensificará sus acciones para poder acceder a alguna audiencia?
–Sí, con el fin de la temporada ya comenzamos a reunirnos para analizar acciones para mejorar el sector. Pinamar no es competitivo, en cualquier lugar del mundo se puede vacacionar por menos dinero.