La Fundación Cariló mantuvo un encuentro con el intendente

Con el objeto de actualizar los requerimientos para la localidad, que está a punto de cumplir cien años, los integrantes de la Comisión Directiva revisaron la agenda y repasaron parte de las inquietudes puestas de manifiesto en enero de 2017.

Durante el transcurso de esta semana, integrantes de la Fundación Cariló mantuvieron un encuentro con el intendente de Pinamar, Martín Yeza, como ya se ha hecho costumbre a lo largo de los últimos años. Participaron del encuentro, además del mandatario y en representación de la fundación, el doctor Gabriel Rodríguez Goyena, presidente, y el director ejecutivo, Pedro Edward, siendo el primero quien hizo declaraciones luego del encuentro.

–¿Cuál fue el tenor del encuentro?
–Efectivamente, como todos los eneros tratamos de tener un encuentro institucional entre la fundación y la Municipalidad de Pinamar para tratar los temas que nos quedaron pendientes de la reunión anterior y aquellos que, entendemos, tienen una entidad como para ser tratados para 2018. Nosotros le trasmitimos al intendente nuestra preocupación por el estado del parque, del paisaje protegido y de aquellas cuestiones que, entendíamos, no estaban realizadas durante 2017, como habíamos planificado. Para sorpresa nuestra, el intendente nos refirió que muchas de esas cuestiones se habían ejecutado, se estaban ejecutando y que lo que faltaba era la comunicación de aquellas tareas. Un ejemplo es que sí está dispuesta la reforestación de 2600 especies destinadas al Parque Cariló, de las cuales algunas fueron plantadas y se está previendo para los meses de junio y julio, producto de la estacionalidad y de la conveniencia de plantar las especies arbóreas en esos meses del año. Se van a plantar en todo Divisadero paraísos y jacarandás para darle un entorno mucho más agradable. Esto, para nosotros, es una noticia enorme, ya que estamos preocupados por la reposición. Como todos sabemos, los árboles tienen una vida útil y ya estamos en la expiración de esa vida útil de la gran mayoría de los árboles de Cariló que con un plan hay que ir cambiando y reforestando. Por otra parte, sí estábamos altamente preocupados por la salvaje desforestación que han provocado estos barrios periféricos de Cariló, y cuando digo periféricos me refiero al Barrio Zorzal, al Barrio Constancia y al nuevo barrio, que no sabemos cómo llamarlo, si Divisadero o Guerrero, con salida al mar.

–O como se los llama ahora: “desarrollos urbanos”.
–Yo lo entiendo, sin compartirlo. Se trata de una tendenciosa actitud comercial de hacer creer que eso es Cariló, en el sentido de Paisaje Protegido, y no lo es.
Acá hay que distinguir dos cosas. El Paisaje Protegido, lamentablemente termina en la calle Constancia. Por lo tanto, estos nuevos barrios no están dentro del ejido dentro del paisaje protegido. Distinto es Zorzal, porque esta categorización llega hasta la Ruta 11. Nuestra preocupación es que el Parque Cariló no se convierta en un corredor vial de emprendimientos comerciales linderos a Cariló. Afortunadamente, Martín Yeza y su equipo técnico son muy sólidos. Tienen un plan director que ya está en ejecución para aquellas urbanizaciones que sean linderas al Paisaje Protegido. De Constancia para Gesell, para que la gente se ubique, van a ser nuevas urbanizaciones que van a tener su entrada por la ruta. No pueden ser las Calles Cerezo y Constancia una autopista o un viaducto para aquellas urbanizaciones. Esto está en ejecución y ello nos ha dado una tranquilidad enorme. Por otra parte, sí se ha trabajado mucho y bien en la calle Avutarda. Si bien no se han terminado los trabajos, se ve que se ha corregido bastante esa parte que se inundaba, se han colocado bombas, se han hecho pozos blancos. Falta, pero se está avanzando.

–¿Igualmente vemos que en algunos frentes se ha invadido parte del espacio público?
–Eso se va a ir ocurriendo. Tal cual se ve en el ingreso al balneario Hemingway, no solo por la ocupación del espacio público sino también por el incomprensible desatino de aquellos que estacionan debajo del cartel que reza “prohibido estacionar”. Otra de las cuestiones que vamos a hacer es ir a visitar el nuevo centro de monitoreo, porque, si bien celebramos que esté presente la autobomba en la entrada a Cariló, no queremos apagar el incendio, queremos que no se produzca. Evitar con el cumplimiento de un protocolo y un sistema de prevención que Martín nos ha comentado. Y vamos a coordinar para realizarlo antes de fin de mes, que es ir a visitarlo con la gente de fundación para ver las 200 cámaras que tiene funcionando permanentemente, que controlan y monitorean todo el partido.

–Un tema recurrente es el estado de las calles. ¿Qué se dijo al respecto?
–Nuestra gran preocupación es el mejoramiento de las calles que están realmente muy mal, especialmente cuando llueve, y nos ha dicho que desde el mes de diciembre, junto con el cambio de la empresa recolectora de residuos, ha comprado un rodillo que será pasado periódicamente, que no es milagroso, con un proceso de mucho tiempo, que cuando empieza suma y que va a dar como resultado que se vaya mejorando la totalidad de las calles del Parque.

–A través de los años se ha intentado normalizar el tránsito de Boyero. ¿Cómo está este trámite?
–También me ha comentado el intendente que, por incomprensibles, mezquinos intereses comerciales, hay una férrea oposición a solucionar el caos que es la calle Boyero. Caos en el que hasta ahora no hemos tenido que lamentar víctimas. No peatonizarla permanentemente pero sí organizarla y corregirla. Es un caos. No se puede caminar. Sumado a eso, el horario de carga y descarga es como si no existiera. No se respeta. Al respecto, el intendente nos ha manifestado que el Consejo Asesor no le ha permitido realizar un proyecto serio de la calle. Igualmente, a partir de hoy vamos a comenzar en un proyecto, ya que es incomprensible que intereses comerciales pongan en riesgo la vida o dañen el parque.

–¿Van a tener un nuevo encuentro con el Ejecutivo?
–Mientras, estamos combinando agendas para el lanzamiento de nuestro segundo libro, que hemos sacado con mucho esfuerzo de todos los integrantes de la fundación, sobre el relevamiento de aves que hemos hecho durante un año. Al respecto, ya hemos regalado ejemplares a la Municipalidad y a las entidades representativas del bosque.

–¿Qué otro punto de coincidencia hubo con el gobierno?
–En coincidencia con el Ejecutivo, decidimos ver la forma de incluir en la Ley de Paisaje Protegido un nuevo inciso que obligue a los comercios a poner un sticker o una calcomanía donde se informe que la localidad es Paisaje Protegido y que no es un parque más.