La fiesta patronal de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro de Cariló se celebra con una misa y la adoración eucarística el sábado 1ro de julio, luego de la cual se servirá chocolate caliente.

Es una de las advocaciones de la Madre de Dios más conocidas, especialmente entre los más necesitados y afligidos que anhelan amor y protección.

Un ícono antiguo que representa a la Virgen de la Pasión es su imagen auténtica y quiere hacer presente el misterio de la redención en Cristo y el de la intercesión de María a favor de sus seguidores.

La devoción a Nuestra Señora del Perpetuo Socorro nació y fue difundida por los Padres Misioneros Redentoristas a quienes papa Pío IX entregó el ícono diciéndoles: “Denla a conocer al mundo”.

En los últimos días, el jueves 22, más precisamente, tuvo lugar en nuestra parroquia como hecho trascendente un primer encuentro en el salón de la capilla San José sobre la Pastoral de la Evangelización Renovada, en el cual el disertante fue el presbítero Pablo Bosisio, de Villa Gesell.

“En concordancia con lo que propone nuestro papa Francisco y por supuesto nuestro obispo Gabriel Mestre en este camino sinodal que venimos transitando ya hace un tiempo largo, esta pastoral tiene la intención, como su nombre lo indica, de renovar la manera de evangelizar. Y lo podemos relacionar con lo que vendrá en setiembre”, explicó María Elena Videla, integrante de la escuela de formación del Movimiento de Cursillos de Cristiandad (MCC), quien participó del evento en Pinamar que se extenderá a todas las parroquias, a fin de lanzar una gran visión diocesana.

“Estamos conociendo un poco la renovación de la pastoral de evangelización y encontrándonos con todas las comunidades para lanzar en setiembre la gran misión diocesana”, amplió.

“El Movimiento de Cursillos es eclesial, de laicos, de difusión mundial. Comenzó en España, más precisamente en Mallorca. Actúa en el interior de la Iglesia Católica, sintiéndose vocacionado a participar activamente en la gran misión del anuncio de la Buena Nueva del Evangelio, a través de una método propio, kerigmático”, señaló Videla.

El Movimiento de Cursillos de Cristiandad cuenta con una serie de grupos formativos para todos los que lo integran, sea a través de escuelas abiertas, como la que se brindó a la comunidad pinamarense, o cerradas, reservadas sólo para cursillistas.