Las irregularidades en la gestión de Yeza durante el 2020

Más de 12 millones de pesos que no fueron destinados a alimentación de niños. Multas a vehículos municipales por 3 millones de pesos. Irregularidades en la administración y falta de información. Las denuncias de la oposición en la rendición de cuentas.

El Concejo Deliberante aprobó el jueves la rendición de cuentas del ejercicio 2020, correspondiente al primer año de la segunda gestión del intendente Martín Yeza. El proyecto fue rechazado por la oposición, pero resultó aprobado gracias al voto doble del presidente del cuerpo, Matías Yeannes.

Durante la sesión especial se presentaron dos proyectos. El primero fue el elaborado por el Departamento Ejecutivo, por el cual buscaba aprobar en el poder legislativo los números de su gestión. El segundo, un proyecto de la oposición, por el cual se intentaba desaprobar la rendición de cuentas del ejercicio 2020 de la gestión de Yeza.

El proyecto de rechazo llevaba la firma de todos los concejales de la oposición, y argumentaba su postura en tres ejes basados en un contexto atravesado por una pandemia: irregularidades en la Sub-ejecución de fondos afectados, falta de información en la rendición de cuentas, e irregularidades administrativas.

Irregularidades en la sub-ejecución de fondos

Por un lado, el proyecto de rechazo cuestionó la ejecución del Fondo Alimentario Escolar (SAE) que fue enviado por la Provincia para la alimentación de niños. El municipio recibió 54 millones de pesos, que se sumaron a un remanente de 8 millones que tenía del año anterior. El Ejecutivo solo destinó 50 millones y no ejecutó los restante 12.

“Los recursos que bajan de Provincia no han sido canalizados en un 100%, y tampoco se pudo mejorar la calidad de los módulos que les corresponde a cada uno de los chicos. Si se demora la ejecución, el poder de compra se ve disminuido por la inflación”, explicó el concejal de Unidad Ciudadana Carlos Conti.

Por otro lado, el proyecto apuntó al Sistema de Atención Medica Organizada (SAMO) que es fundamental para Pinamar. El 70% de esta partida debería estar destinada al mejoramiento del sistema sanitario, pero solo hubo una sub-ejecución del 48%. Lo mismo ocurrió con el Fondo de Infraestructura y Equipamiento Comunitario, donde solo un 40% de los recursos que estaban destinado para ese fin se sub-ejecutaron.

El concejal Conti afirmó que “uno de los casos extremos” que se presentó fue el de los fondos afectados a la obra de tres pluviales que están plasmados en el presupuesto (el dinero se encuentra en las arcas del municipio) que no se ejecutaron. La oposición remarca que, con el transcurso del tiempo y la evolución de la inflación, la calidad de esos pluviales no será la misma que se proyectó.

Además, señalaron que tampoco se ejecutó el fondo que llega al municipio correspondiente al ReBa (Registro Provincial para la Comercialización de Bebidas Alcohólica), que estaba destinado para aplicar políticas públicas para contener las consecuencias de diferentes adicciones.

Irregularidades administrativas

En el proyecto también se enfatizó en las “irregularidades administrativas” en esta rendición de cuentas, como la desactualización del inventario patrimonial del municipio. Como consecuencia del mismo, se desprende “la ineficiencia” en la fiscalización de los gastos que se tiene en el transcurso del año.

También se cuestionó contratos firmados con locaciones, cuyas oficinas nunca fueron usadas por el municipio. Y la falta de transparencia en el uso de los artículos 70, ya que “no se explica la necesidad por el cual se contrata a un empleado, ni el servicio que cumple ni el haber que percibe”.

Además, se señaló irregularidades en obras públicas que tendrían que estar finalizadas, como el CAPS de Intermédanos o el Centro Cultural de Ostende. “Por diferentes errores del Ejecutivo y el privado al día de hoy no están finalizadas”.

Y, por último, remarcaron que los vehículos municipales tienen infracciones por una suma de tres millones de pesos.

Falta de información

En el proyecto de rechazo de la rendición de cuentas también se reclamó “información fundamental que faltó” en el caso de la ejecución de la planta de personal aprobada en el presupuesto 2020 y a la que finalmente se ocupó en ese ejercicio.

Por otro lado, observaron la falta de información del contador de la municipalidad sobre la ejecución de los fondos. Y la falta de informe del intendente sobre el cumplimiento de los programas y metas que se habían plasmado en el presupuesto 2020.

“Estos tres ejes se encuentran profundizados por una situación en cada uno de los ejercicios. El intendente ha aprobado el Presupuesto correspondiente a este ejercicio habiendo transcurrido un 60 o 70%. Como consecuencia, tanto el Presupuesto como la rendición de cuentas se vuelva un mero acto administrativo y no cumplen su objetivo”, criticó Conti.

“El oficialismo, al tener la mayoría, tiene la impunidad de votar una rendición de cuentas sin argumentar por qué la acompaña”, finalizó.