Los habitantes de un asentamiento tendrán casa propia

Son los moradores de La palangana, el barrio de catorce familias que la gobernadora bonaerense supuso erradicado durante su última visita. Se trata de viviendas gratuitas entregadas por el gobierno nacional.

Fernando Ávila, a cargo de la Dirección de Vivienda y Hábitat, se refirió a la remoción del asentamiento, la restitución de las tierras a la Municipalidad y a cómo evoluciona el proceso que terminará con el problema de las familias que hoy habitan el pequeño espacio fiscal.

–Desde el 2013/2014 se viene hablando de La palangana como un problema acuciante. En la última visita de María Eugenia Vidal, ya en su rol de gobernadora, anunció que se trataba de un problema solucionado. ¿Cómo está ese proceso?
–Las casas donde van a ir a vivir esas familias ya están construidas. Ellos ya están teniendo intervención sobre sus viviendas, porque se encargan de erigir sus pilares de luz, que van a estar a nombre de ellos, como todos los servicios. El pozo lo están haciendo ellos. Así que estamos próximos a hacer entrega de estas viviendas. Tenemos que coordinar, como dice la ordenanza, para un único día la entrega de todas las casas para trasladar a todos los habitantes de La palangana y la recuperación del espacio. Recordemos que en su gran mayoría se trata de un espacio verde y público que vuelve a la comunidad. Se van a demoler las construcciones precarias y se va a generar un espacio de uso para la comunidad.

–¿Qué es lo que pagan y qué no los moradores de las nuevas casas?
–La verdad es que es un tema que ha generado muchas polémicas. Políticamente, todos los bloques estuvieron de acuerdo. Por unanimidad se aprobó la posibilidad de vender en cuotas los terrenos para reubicar a los habitantes del asentamiento en estas viviendas, que son enviadas desde Nación, a raíz de las gestiones hechas desde la Provincia, destacando las tratativas del intendente y sobre todo del secretario de Desarrollo Social para lograrlas. Desde Vivienda y Hábitat, lo que se gestionó fue la entrega de los terrenos a través del Concejo Deliberante y este trabajo en conjunto está llegando a su fin porque faltan pocos días para concretar la reubicación.

–¿Las casas son gratuitas?
–Las casas son gratuitas; lo que no es gratuito es el terreno, porque las casas las bajan desde el Ministerio de Desarrollo de Nación, pero el terreno lo pone el Municipio y por eso lo da a pagar en cuotas, tal y como hacen el resto de los vecinos de ese plan que es el Plan Familia Propietaria.

–¿Cuántas personas están todavía en La palangana?
–Todas, porque como dice la ordenanza no puede hacerse en partes. Tienen que mudarse en conjunto y recuperar el espacio. Pero ya están consolidadas las calles. Las viviendas ya están, ya tienen agua corriente. Estamos esperando la llegada de un transformador para que tengan luz y puedan mudarse.

–¿Cuál la ubicación de estas nuevas casas?
–Av. Central y Lyon.

–¿Cuál ha sido del impacto en el entorno?
–Lamentablemente no está bien visto e incluso, para la sociedad, la gran crítica es que es gente que ocupó un lugar, un espacio verde y público de manera ilegal, mantuvo el asentamiento durante once años, y ahora se le da una oportunidad de tener su vivienda, con lo difícil que es para el resto de la comunidad. Esa es la crítica del vecino que trabaja desde hace muchos años, alquila hace muchos años, sufre los trastornos de lo que es mudarse una y otra vez por la dinámica que tenemos en Pinamar, como lugar turístico, y por otro lado que a esta gente se le está entregando la casa completa, lista para ser habitada. Esto genera el repudio de parte de los vecinos.

–Además, mucha gente ha intentado en gestiones anteriores llegar a la casa propia, con otros planes, con otras promesas que no fueron cumplidas y ahora se les está entregando la casa completa…
–Se les entregan no solo los terrenos a la gente de La palangana sino que en total se entregaron 208 lotes para familias en estado vulnerable, inclusive la Ley Nacional de Hábitat y la ley provincial dicen que el 10% de los lotes sociales deben ir a gente en situación de vulnerabilidad social. Nosotros entregamos los 208 lotes a familias en condiciones vulnerables y, de esos, catorce fueron a las familias que habitaban el asentamiento como parte de un plan nacional tendiente a la erradicación de este tipo de conglomerados y como una medida de gobierno. Tenemos muy cerca lo sucedido en Gesell, que no pudo controlarlo y la dinámica propia de los asentamientos hizo que creciera desmedidamente, y tanto los concejales como los funcionarios y el intendente lo hicimos pensando en el futuro.

–¿Para vos, participar de este cambio de características históricas debe ser relevante?
–Hoy me siento orgulloso de ser parte de este proceso, en el cual vamos a poder decir que en Pinamar no hay villas.

–¿Cuando se relocalizará a la gente?
–Estamos a la espera de de un transformador que tiene que colocar la CALP, entre fines de marzo, principios de abril. A estas catorce familias se les está dando una oportunidad; he podido conocerlos, es gente trabajadora, que conserva sus empleos en el tiempo.

–¿En relación al tema electoral vas a participar en alguna lista?
–No lo he decidido, estoy bien donde estoy y es algo que decidirán los partidos políticos.