El domingo pasado se presentó en el Hotel del Bosque el candidato a presidente por el partido Despertar, José Luís Espert, acompañado por integrantes de la lista que encabeza. Previamente a un intercambio con la prensa, el dirigente habló con referentes de la tendencia, especialmente convocados para la ocasión.

El candidato local Alejandro Oliveros hizo uso de la palabra, previo a la alocución de Espert, oportunidad que aprovechó para darle la bienvenida a la prestigiosa figura.

“Pinamar en doce años, que es el tiempo que estoy acá, ha superado el record con la cantidad de intendentes que hemos tenido, que se eleva a seis intendentes”, comenzó Oliveros, quien enumeró a los que se habían sentado en el sillón de Caporale, y agregó: “Tenemos un Concejo Deliberante que levanta la mano en función de favores y retornos. Nosotros no sabíamos dónde ubicarnos, porque no nos gusta nada de lo que hay hasta que pudimos tener llegada a José Luis Espert y su gente, porque queremos terminar con esta delincuencia, con este robo y la ingratitud que tienen los mal llamados dirigentes políticos con la comunidad. Compartimos la doctrina y en especial lo que se ha perdido en la Argentina, como son el ideal de los valores y los principios”.

Espert
Acto seguido, fue el propio candidato a presidente quien asumió el mando de la oratoria para decidir que era momento de brindarle diez minutos a la pormenorización de su proyecto.

“En nuestro espacio nos preguntamos poco y nada cuándo es que comenzó la Argentina a caer, caer y caer… La Argentina hace 80 años que no para de ir para atrás. Es impresionante cuando uno ve los datos, lo contundentes que son. Argentina, durante la primera mitad del siglo pasado el promedio estuvo entre los cinco y seis países más ricos del mundo. A pesar de las dos guerras mundiales, de la crisis del 30, Argentina en esa primera mitad tuvo esa ubicación. El ingreso per capita de nuestro país estaba entre los cinco o seis más altos del mundo. A mí no me interesa asignar culpas sino decirles que hace mucho tiempo que vamos mal. A mediados del siglo pasado, Argentina comienza un tobogán que no paró hasta el día de hoy. Todavía hoy seguimos cayendo en el ranking mundial de ingreso per capita hasta ocupar el puesto 90”, señaló Espert.

Por otro lado, el disertante se refirió a niveles de pobreza de los cuales nuestro país nunca pudo salir. Graficó la situación al decir que hace 30 años que el país no puede bajar el porcentaje del 30% de nivel de pobres. “Ya hemos echado raíces en niveles de pobreza que Argentina nunca tuvo”, agregó.

Tras de aludir a la caída del ingreso per capita y a los niveles de pobreza, Espert hizo referencia a los índices de inseguridad.

“Además de lo antedicho hay una cuarta calamidad que tenemos y es que nunca tuvimos los niveles de consumo y producción de drogas que hoy tenemos y que se agregan a estos 80 años de decadencia. Pero hay una quinta todavía, que es la proliferación de villas y asentamientos: no ha sido nunca la que ha ocurrido en los últimos 20 años. Y hay una sexta, y con esto termino, que hace de las anteriores cinco la nada misma, y es que en esas villas miseria ya nacen chicos con droga en sangre… Amigos, Argentina está pariendo zombis. ¿Qué Argentina les queda a nuestros hijos y nietos que van a tener que convivir con chicos que hoy ya están naciendo con droga en sangre? No hay futuro si esto no cambia. Por eso me tiene sin cuidado, cuándo y por qué o quiénes son los culpables de esta decadencia. Esto hay que terminarlo urgente. Tenemos que hacer algo para terminar con este flagelo”, añadió.

Luego se refirió a los déficits de la educación y a la deserción escolar. Tal cual lo hiciera en otros medios, Espert fue duro con el gremio aeronáutico que complicó los viajes de la gente durante el fin de semana largo. En este punto hizo foco en que hay que terminar con el unicato sindical e introducir lo que se denomina democracia sindical.

El candidato les dedicó parte de su discurso a los piqueteros. Dijo que tendrían que estar presos, “porque la calle está para que la gente y la mercadería circulen, no está para que sea cortada. Si a la gente la reventamos a impuestos como lo hace este sistema para financiar a planeros, éstos no se pueden convertir en piqueteros que le cortan la calle a la gente que paga impuestos. Piquetero que corta la calle va preso. Esto no es ideología, es sentido común”, concluyó.