Piden aminorar la presión tributaria

Tal cual ya lo habían esbozado, diferentes sectores vinculados al turismo presentaron un petitorio solicitando que se morigere el impacto de los gravámenes y tasas. Diversos factores refuerzan la postura del empresariado.

Que la temporada no fue un éxito no es una novedad. A pesar de la ausencia de las clásicas estadísticas al finalizar cada quincena, el panorama es más que elocuente. Entre el clima, las tapiocas, y los precios de Brasil, la concurrencia de turistas ha sido notablemente más baja que el año anterior, que, dicho sea de paso, tampoco fue de las más brillantes. Este escenario poco feliz ha sido el puntapié para que diferentes empresarios y comerciantes del Partido de Pinamar se hayan aunado en un pedido común: la declaratoria de emergencia económica con una reducción y/o exención en el pago de las tasas.

Con este objetivo, representantes de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica (AEHG), la Cámara de Comercio de Pinamar y la Asociación de Concesionarios de Playa concurrieron al Honorable Concejo Deliberante para formalizar el pedido. La reunión contó con la presencia del Secretario de Hacienda, Juan Ibarguren, invitado por la presidencia del HCD, en función de que cualquier respuesta posible ante el reclamo, debería estar avalado por el Ejecutivo, ya que no es el concejo el organismo que deba tomar esas decisiones, un hecho que fuera aclarado al principio por Mercedes Taurizano. A continuación se le dio la palabra al presidente de la AEHG, José Pablo de León, quien aclaró que si bien el HCD no toma las decisiones en cuanto a la economía del Municipio, sí toma decisiones que terminan desfinanciando a los privados. Brevemente el empresario gastronómico explicó algo que es por demás sabido, que los servicios incrementaron un 300%, los impuestos provinciales un 40%, y que el módulo aumentó el 52%. Que este combo de aumentos se ve potenciado por las políticas nacionales y provinciales que tienden a menoscabar el turismo interno, refiriéndose, entre otras cosas, a la quita de feriados; que el Municipio antes de la temporada pidió discreción a la hora de aumentar las tarifas, una solicitud que no solo se entendió sino que además la mayoría acató incrementando un 10% y más de uno ni siquiera eso. Por todo esto, los comerciantes pidieron un acompañamiento del Municipio, solicitaron una exención o al menos una reducción de tasas para este año; y la colaboración para trabajar con Provincia y Nación en la generación de políticas públicas que apunten a promover el turismo interno. Como parte de la presentación, dieron el ejemplo de las políticas establecidas por el Municipio de Catamarca, que redujo un 50% las tasas para los gastronómicos y hoteleros.

Luego se expresó la Asociación de Concesionarios de Playa, que por otro lado fue el sector más castigado esta temporada. En la voz de Emilia Danna, los concesionarios plantearon que el rubro, además de las inclemencias del tiempo (que aún padecen) sufrieron “las complicaciones producidas por la demolición, la reconstrucción de las unidades, una Avenida del Mar destruida, y un Pinamar detonado”. Comentó que han perdido clientes porque en su mayoría no esperaban que sus balnearios habituales terminaran a tiempo, por lo que se inclinaron por aquellos que no debieron reconstruir. A pesar de algunas diferencias con los gastronómicos y hoteleros, este sector también pidió el acompañamiento del Municipio a través de una declaratoria de emergencia económica y una reducción de las tasas. En medio de las razones esgrimidas para solicitar la colaboración del Municipio, los comerciantes no dudaron en recalcar que todas las políticas apuntan al deterioro del turismo interno, tanto a nivel nacional como municipal, éste último que no aporta la infraestructura necesaria para mejorar la atención al público.

En respuesta, desde el oficialismo más cerrado, el concejal Augusto Urrizola comentó que no era probable una declaratoria de emergencia económica, pero que el Ejecutivo entendía la situación e incluso estaba barajando algunas opciones, como para colaborar con el empresariado local, especialmente con los concesionarios, que han sido los más castigados esta temporada. Por otro lado, defendió a ultranza las políticas públicas nacionales y locales, lo que sirvió para generar un ambiente más tenso en el encuentro, que se tradujo en un intercambio de gritos y refutaciones varias, que dio por finalizado el presidente de la AEHG intentando resumir el motivo de la reunión. De León pidió a los ediles que entendieran la posición de los comerciantes, que son ellos los que sostienen el mercado interno, que necesitan la colaboración de los concejales para trabajar con la Nación y la Provincia en políticas públicas que apunten a incrementar el turismo interno y culminó solicitando un “mimo” de parte del Estado municipal, y sobre todo ser escuchados, que son ellos los que sosteniendo los empleos fomentan el consumo; por eso pidió más reuniones y continuar el diálogo. Para cerrar este primer contacto y en respuesta a la cuestión tributaria solicitada, Juan Ibarguren comentó que ya se estaba evaluando el pago en cuotas, que ya se había efectivizado la dilación de la fecha de vencimiento y que además se estaba analizando subir el piso de la tasa variable.

De esta manera se dio por finalizado el encuentro, tras el cual, algo más tranquilos pero sin bajar los brazos en cuanto al reclamo, los comerciantes y empresarios locales esperan recibir noticias en breve.