Al aumento del 4% de los combustibles previsto para la segunda quincena de enero se le suma una tasa municipal que encarece aun más el precio y es considerada ilegitima e ilegal.
El tratamiento del presupuesto 2023 reavivó la polémica por la denominada “Tasa Vial”, considerada doble imposición en la que el municipio busca gravar a los combustibles, cuando ya se tributa a nivel nacional y encarece aún más los aumentos previstos para la segunda quincena de enero del 4% a los combustibles.
Según el esquema de aumento de los precios de la nafta y el gasoil acordado entre el Ministerio de Economía y las empresas petroleras, los combustibles tendrán un incremento de 4% durante enero -se aplicarán en la segunda quincena del mes- y se irá desacelerando a 3,8% en marzo, tras el compromiso cerrado a fines de noviembre cuando ingresaron al programa de Precios Justos.
Con ese porcentaje de suba, los precios promedio para las estaciones de servicio en CABA pasarían de $150,90 a $157 para el litro de nafta super; y de $185,70 a $193 para la premium. En tanto, el litro de gasoil pasará de $162,10 a $168,60 y el litro de gasoil premium de $222 a 231 pesos.