Pinamar, de pie ante la tormenta

La comunidad, personal municipal, de Telpin, de CALP, Defensa Civil y Bomberos, entre otros, estuvieron trabajando para lograr dar una respuesta rápida a las necesidades de la gente.

El fin de semana pasado una tormenta se desató sobre el litoral bonaerense, manifestándose con distintas intensidades en cada localidad. En lo que atañe a Pinamar, los paradores fueron quizás los más perjudicados, ya que dos de ellos sufrieron la voladura de gran parte de su estructura y las carpas y sillas que no se pudieron poner a resguardo, dada la intensidad del viento y la rapidez con que se desencadenó el fenómeno. Resultaron afectados los paradores CR y Riviera, ya que, además del mal tiempo generalizado, una tromba marina recorrió de sur a norte nuestras playas.

En las localidades que conforman el partido se vieron árboles caídos, varios sobre rodados de particulares, postes y cables de alumbrado, la red eléctrica y el tendido de Telpin.

La emblemática obra móvil de Pájaro Gómez emplazada en Bunge y playa, Dibujando Espacios, fue abatida por el viento y sus nueve metros de altura dieron por tierra. Aún destruida y yaciente siguió siendo de interés fotográfico por parte de los osados turistas que se acercaron a ver los estragos de la tormenta.

“El trabajo comenzó el domingo temprano y terminó casi en la madrugada del lunes con una concentración de 40 personas en el cuartel. La guardia permanente y la guardia semanal siguieron trabajando mientras que el pueblo lo solicitaba”, dijo el jefe de Bomberos, Hugo Curuchet.

O sea que en el momento de la tormenta estaban la guardia semanal, conformada por catorce personas con un oficial a cargo, y la permanente, que es la que funciona del 15 de diciembre al 28 de febrero, que cumple doce horas en el cuartel y es paga. Esta última, integrada por cinco personas. Luego se sumarían más efectivos, llegando a totalizar los 40 a 45 efectivos mencionados.

Por su parte, el segundo jefe, Patricio Silva, dijo: “En realidad somos los primeros que salimos ante la emergencia, ya sea viento o lluvia; la gente, lo primero que se acuerda es de Bomberos y ahí empezamos nosotros a distribuir las tareas que no hacemos nosotros. Lo que nosotros atendemos es lo que son emergencias, rescate de personas. Donde hay riesgo de vida es donde actuamos, sobre todo; y después, si podemos evitar que se caiga un pino en una casa y lo podemos rescatar, lo salvamos o por lo menos lo vamos a intentar”.

Lo que queda en claro es que todo gira en torno a la operatoria bomberil y que son ellos los que determinan el grado de las urgencias.

Hugo Curuchet destacó que lo más importante es prevenir, a raíz de que considera que no hay que perder de vista los árboles viejos y las ramas que pudieran entrañar algún tipo de peligro.