El reclamo de los vecinos del parque es continuo. Piden que se levante la basura, que arreglen las calles, que haya presencia policial. Pero cuando se cumplen estas acciones, piden que las mantengan y no decaigan.

Dejar en condiciones la calle Cerezo, una de las principales del Cariló, es una tarea diaria. Pero, a veces, la topadora municipal deja la calzada en peores condiciones.

Según Eduardo Bari, del Foro de Amigos de Cariló, la esquina de Cerezo y Petirrojo es por estos días un lugar peligroso. “Hace doce días pasó la máquina y dejó al descubierto el caño de gas natural. Hicimos el reclamo, como pide el Municipio, a través de la página Web, y tuvimos dos mails de respuesta. El primero, que lo iban a derivar al área correspondiente; el segundo dice que están en vías de solución”.

“También hicimos la denuncia a la empresa Proagas, que vino y cercó el lugar. Pero como en realidad la tierra fue retirada por el Municipio, lo que dice la firma es que la Municipalidad debe reponer la cota original. Porque acá el caño no pasa por la calle sino lo que sería la vereda”.

Uno observa que la malla amarilla de protección está al descubierto. “Acá la máquina se metió en la vereda, quitó la tierra y hoy tenemos una diferencia de un metro respecto a la cota original. Que en realidad es la profundidad del caño de gas, con lo cual se expuso todo y quedó la cinta afuera”.

“La máquina pasó en dos oportunidades, pero no reponen la vereda como estaba, por ende no se termina de tapar totalmente el caño”.

–¿Supuestamente a qué profundidad está ahora el caño?
–A unos 30 centímetros, si miramos cómo quedó la altura de la calle. Y estaba peor, porque la lluvia, que arrastró arena, lo tapó un poco. Pero la cinta que indica el caño está a la vista. Por suerte el caño no se llegó a romper. Pero el peligro es ese, que se produzca una pérdida de gas en este caño principal.

–Me decía que la arena de acá la llevan para tapar otros agujeros, va y viene...
–La metodología es bastante simple, rudimentaria y hasta ridícula. Vienen arrastrando arena de la calle y donde hay un agujero la dejan ahí. Ni hablar de suelo seleccionado. Lo que hacen es que, en un lugar donde no hay ningún problema, generan un hueco por trabajar con arena común. Pero, además, si había suelo en otro lugar se lo quitaron. Con lo cual empezamos a tener dos problemas.

“Coincidente con esto, en la esquina de Cerezo y Divisadero, se enterró el Montemar. Y si en esa esquina emblemática de Cariló pasa esto, qué queda para el resto... Pero todo es por lo mismo: mueven la arena o porque está seca o encharcada y el problema está. La solución es reponer el suelo que se han llevado y llevar las calles a su cota original”.

“Si es así, no habría problemas, porque los domicilios tienen la obligación de tirar el agua de lluvia en sus domicilios. Y supuestamente el Municipio tiene que verificar eso. Lo mismo sucede en la zona comercial, donde se inunda mucho la parte hotelera. Ahí las responsabilidades están compartidas”, sostuvo Bari.

“Y no tirar el agua en la calle, porque tenemos inmensas rampas de hormigón para entrada y salida de vehículos y el agua que cae del techo va a parar a la misma rampa y de ahí a la calle. Hay un exceso de agua, pero eso no quita que el Municipio haga lo que tiene que hacer”.

–¿Qué solución hace falta?
–Lo ideal es volver a la cota original para que el agua escurra naturalmente, trabajar con suelo seleccionado. El Consejo Asesor de Cariló ha presentado los estudios realizados en otros lugares, distintas formas para darle tratamiento. Pero si esto funcionó durante muchos años simplemente con un suelo seleccionado, estoy seguro de que podemos encontrar cosas mejores. Pero por lo menos repongamos lo que era: volver a las cotas originales.