La concejal de Propin Gabriela Ferretti pidió explicaciones al Departamento Ejecutivo tras la denuncia presentada por su espacio sobre una estafa realizada por un empleado municipal que se habría apropiado de 3 lotes durante la gestión de Juntos por el Cambio con una escritura “plagada de datos falsos”.

Si bien las investigaciones del espacio vecinalista empezaron a principios del año pasado, las advertencias de vecinos sobre irregularidades en 3 lotes ubicados en la calle Santa Rosa de Lima de la localidad de Mar de Ostende iniciaron en el 2018.

Según Ferretti, desde ese año los vecinos alertaron al Ejecutivo y al Concejo Deliberante sobre las irregularidades en los lotes, que desde hace años figuraban con el mismo dueño y nadie los reclamaba ni pagaba los impuestos. Las propiedades fueron ‘compradas’ por Patricio Joel Oviedo, un empleado municipal que se desempeña en el área de fiscalización de concesiones públicas.

“Pedimos los expedientes a la municipalidad y un tercer expediente de los 3 que solicitamos no llegaba. Los habíamos pedido en marzo del 2020 y llegaron recién en diciembre; y cuando llegó, saltó a la vista la irregularidad que había en la escritura. Nos pusimos a buscar la información y todo saltó muy rápido”, relató la concejal.

“Buscamos al escribano, que ya había tenido problemas con su matrícula, y al ‘vendedor’ de los terrenos. No coincidía el nombre de la persona que figuraba en la escritura como titular con el DNI ni la edad que podía tener, y cuando nos contactamos con él nos dijo que no tenía nada que ver”, continuó.

A partir de allí, presentaron una denuncia en la fiscalía, que posteriormente realizó los allanamientos entre los implicados en la maniobra. De esta forma, se determinó que el escribano no tenía la escritura, y en el domicilio de Oviedo se requisó documentación sobre los lotes y otra escritura de los mismos lotes pero a nombre de otra persona vendedora diferente.

“El empleado municipal sabía que había una irregularidad. Y lo más grave es que pasó por la municipalidad y, con el alerta constante de los vecinos, nunca se preocuparon en revisar la escritura”, señaló Ferretti.

Además, reveló que en dos de los tres lotes actualmente se están construyendo casas que están próximas a concluirse. La sociedad anónima que construye pertenece a dos personas: Patricio Joel Oviedo y Sebastián Manrique, el funcionario que estaba a cago del área de Fiscalización en el 2018 y fue separado del municipio a raíz de la irregularidad con los chiringos de Cariló.

“El Ejecutivo tiene que llevar adelante una acción como damnificado. Se enviará un proyecto al Ejecutivo en la próxima sesión del Concejo para que se revean los procedimientos. Hay responsables en la municipalidad: fueron advertidos por los vecinos, hubo antecedentes y no hubo control”, manifestó Ferretti.