Un rico inicio y un futuro promisorio

Dunlop acentúa su presencia en Pinamar con la llegada de cubiertas para motos. Su representante en el distrito, además de su trayectoria, ofrece una rectificadora de llantas y avanzada tecnología.

En Argentina decir Dunlop es decir Geveco SA, el único importador de la marca en el país. En Pinamar ocurre algo similar, ya que decir Dunlop es decir Neumáticos Carlitos, el primer negocio del rubro en el partido, ya que abrió sus puertas hace más de 40 años: cuatro décadas fomentando amistad y respeto en base a un línea de conducta iniciada por Carlos Bertagnolli en el antiguo local de la calle Júpiter.

Hoy el emprendimiento está ubicado en Del Lenguado casi Júpiter, y los cambios operados a través de los años dan como resultado que estemos frente a un verdadero laboratorio, donde la tecnología se hace presente con lo último y más avanzado. Ello da como consecuencia que “ser un soldado de Dunlop” no sea casual, ya que las exigencias en aras de los mejores resultados pasan por poner en valor la aparatología de que dispone Neumáticos Carlitos.

El ansia de superación es constante. Uno de los últimos adelantos es la incorporación de una rectificadora de llantas, de chapa y de aleación, que permite realizar el trabajo en poco más de una hora. Aunque por ahora esta prestación está pensada para los clientes, se evalúa que en breve se podrá brindar el servicio a otras gomerías que quieran contar con el adelanto.

Neumáticos Carlitos, a partir de diciembre, incorpora neumáticos Dunlop para motos. De esta manera pasa a cubrir otro perfil de clientes pero siguiendo la línea, ya que muchos propietarios de camionetas portan no sólo cuatriciclos sino también motos de distintas cilindradas. Las cubiertas que se suman a la oferta son pensadas para motocross, motos de trial, de ruta, entre otras. Un comentario aparte es que la propuesta se nutre de gomas para las míticas Harley Davidson.

Además, hoy en Neumáticos Carlitos se realizan trabajos de alineación, balanceo 3D, rotación logrando mayor durabilidad y una mejor performance, reparación y venta de neumáticos y accesorios.

Por eso Carlos Bertagnolli (h) agradece a sus clientes de años, a los que hace poco alimentan el vínculo y a aquellos que vendrán en busca de soluciones definitivas. Un agradecimiento que se hace extensivo a Dunlop, a Geveco SA y de manera especial a su gerente de Ventas, Jorge Trotta, siempre apoyando a Pinamar.

El futuro es promisorio, pero para valorarlo no hay que olvidar el pasado. No hay que dejar de ver aquellas fotos que nos dan un mensaje desde el inicio de la historia donde vemos a Bertagnolli padre flanqueado por sus compañeros de entonces. Allí están: el nene Brandari, Castañares, Curade, Legarreta y el mismo Bertagnolli. Para los memoriosos, seguro que cada apellido se condice con una anécdota, con un momento de la historia de Pinamar.

Era la época fundacional de la ciudad, recién nacida, en la primera estación de servicio y con el primer gomero. Al lado de un surtidor con pinta de extraterrestre y que suplió a aquel inicial a manivela. Otros tiempos y el mismo compromiso de siempre, el de hacer las cosas bien. Un espíritu que hoy sobrevive en cada cliente satisfecho que retira su rodado de Neumáticos Carlitos.