El comienzo de las vacaciones de invierno el martes 17, que se prolongan hasta el sábado 29 de julio, hizo modificar algunos horarios de las misas y actividades de la parroquia en ese período, pero no la intensidad de la agenda.

La llegada de turistas reaviva el movimiento en las localidades que integran el Partido de Pinamar pero, en lo que atañe a las celebraciones, se desarrollarán en La Paz de lunes a viernes a las 17.30 y en los fines de semana quedarán iguales.

El lunes a las 16.30 será rezado el Rosario por los enfermos con el grupo San Roque, mientras martes, miércoles y jueves llevaremos a cabo la adoración de 16 a 17.30. El viernes (como siempre) será de 15 a 17.30.

El sábado 22 de julio, a las 11, se oficiará en la iglesia céntrica la misa por la conmemoración de Santiago apóstol, organizada por la colectividad boliviana, que lo tiene como patrono.

Como es costumbre todos los años, luego del oficio religioso, se despliega en el playón una feria de artesanías y gastronomía con platos típicos del altiplano.

Esa misma noche a las 20 compartiremos una cena por los festejos patronales de la capilla San Francisco Solano, de Valeria del Mar, en el salón Laura Vicuña de Ostende. El valor del cubierto es de $1.000 para los adultos y de 800 para los niños, y el menú consiste en empanadas y guiso de lentejas.

En la jornada siguiente, el domingo, a las 10 está programada una misa y posterior desayuno.

La misión solidaria no cesa y, desde Cáritas, haremos una campaña para pedir donaciones de zapatillas o calzados para niños y adultos.

Si bien la colecta pasada de Cáritas tiene esa finalidad, como se había anunciado, no alcanza a cubrir las necesidades, y es así como la parroquia apela a quienes dispongan y puedan para que acerquen sus donaciones a las capillas o a la secretaría de avenida del Libertador.

Como hemos demostrado un buen poder de convocatoria en los encuentros para parejas, estamos invitando para el 22 al 24 de setiembre, en el hotel Belvedere, a los hombres mayores de 35 años a “parar la pelota” y detenerse a pensar cómo quieren seguir viviendo el segundo tiempo de sus vidas.