Una “maleza” de nuestro jardín, a la mesa

Hay numerosas definiciones que explican qué es una “maleza”, pero si hacemos una síntesis podríamos decir que una maleza es una especie vegetal que crece en un lugar en el cual le resulta molesta a alguien para plantar lo que él quiere plantar.

Entonces, el término maleza no implica que una especie vegetal en cuestión sea perjudicial, venenosa o implique un riesgo para la salud de las personas. Dice el Dr. Rapoport en su libro sobre el tema que “deberían ser llamadas buenezas”.

Una buena parte de los así llamados vegetales son comestibles y aptos para ser preparados de diversas maneras antes de ser llevados a la mesa: ensaladas, bocadillos, aderezos, salsas, rellenos, hervidos, infusiones y de tantas maneras como se le ocurra a la creatividad de quien cocina. Algunas de las especies que podemos encontrar en los lugares menos alterados de nuestros poblados y aun en nuestros propios jardines son: achicoria silvestre o de campo, albahaca silvestre, amor seco, avena blanca, berro, besito porteño, cardos varios, cuernos del diablo, diente de león, flor de santa lucía, huevito de gallo, lantana, llantén, malva silvestre, acelga silvestre, menta piperita, mostacilla, ortiga, pasionaria, quínoa, repollito de agua, rúcula, ruda, tala, totora, trébol blanco, verdolaga y etc., etc., etc.…

Este link http://malezascomestibles.blogspot.com.ar/ a un blog sobre el tema es una invitación a intentar su reconocimiento, armarnos de un block de datos y dibujos y salir a recorrer nuestro vecindario. Así podremos, mediante una actividad entretenida, engrosar las huestes de los amantes y consumidores de nuestras buenezas silvestres, siempre nutritivas y apetitosas.