La argumentación de la vecina es que en el momento de emprender el regreso de ese país este no se hallaba comprendido dentro de aquellos que estaban afectados por la pandemia. Pero, cabe decirlo, ante la presión policial un juez de Dolores determinó su detención domiciliaria que ya fue cumplida.

Una segunda transgresión sería la de haber abandonado su domicilio para luego ser detectada su presencia en la playa. Una fuente desmintió que la mujer haya sido penalizada con el pago de una sanción pecuniaria.

Asimismo, autoridades de Costa Esmeralda desmintieron que haya una demanda masiva de los vecinos para que se les permita jugar golf, aunque sí admitieron que están realizando las diligencias respectivas para que desde la municipalidad de la Costa se permita a los vecinos transitar en las cercanías de sus domicilios. Con ese fin es que las autoridades del barrio proponen un protocolo de control que marque los lineamientos de quienes deseen caminar en el espacio público.