Así lo manifestó el concejal de Unidad Ciudadana luego de denunciar al intendente en los tribunales de Comodoro Py y tras ser consultado acerca de si hubo un acercamiento con el Ejecutivo para aclarar el conflicto.
A horas de haber radicado la denuncia por un supuesto desvío de dinero destinado a la obra pública, el concejal expone las razones que lo movilizaron a llevar adelante la acción, en la que cada integrante de su bloque tuvo su participación.
–¿Cómo se genera la denuncia al intendente, Martín Yeza?
–Ayer concretamos la entrada de la denuncia en Comodoro Py porque se trata de fondos nacionales, fondos de todos los argentinos, que fueron destinados a obras en nuestra municipalidad, y también una presentación en la oficina anticorrupción que está a cargo de Laura Alonso. En principio, es confirmar un poco nuestro trabajo como concejales, es controlar, discutir el presupuesto, la cuestión económica, la cuestión estructural de servicios, la calidad de los servicios y los reclamos de los vecinos, desde hace tiempo, vecinos nos venían reclamando el tema obras. Digo obras porque venían reclamando ante irregularidades en obras que se hicieron dos veces en la plaza de Ostende; también el tema de la cancha de la Escuela Corbeta Uruguay, la base del Polideportivo. Muchos reclamos y la exigencia del vecino para que nos pongamos a controlar porque veían que había irregularidades.
–¿La denuncia en qué parte de la obra pública hace hincapié?
–En este caso la obra, que es Centralidad Pinamar, abarca Bunge y playa, Bunge y Burriquetas, Bunge y Marco Polo y una intervención más en Bunge y Shaw. También nos exigían que estemos encima porque había muchas irregularidades, las cuales las empezamos a seguir y esto nos llevó a visualizar a algunas cuestiones que tenían que ver con certificaciones de pagos a diciembre que no coincidían con la realidad de lo que estaba en obra, como fue una obra que tuvo vencimiento de plazos y se dio una prórroga para seguir. Estuvimos esperando los plazos para ver si había algún tipo de acercamiento a la realidad. Cuando se agotó esa instancia, lo que hicimos fue empezar a concretar en papel las irregularidades y ver cómo podíamos subsanar eso. Una de las formas fue presentar la denuncia, que la Justicia investigue y el intendente y sus responsables respondan y quede claro si hubo un desviamiento de fondos nacionales en Pinamar. Para nosotros está claro que hay cosas que se han pagado como certificaciones de pagos con altos porcentajes de la obra y, cuando vas a ver la obra y controlar lo que dice el pliego, no están, y cuando evaluás la certificación de pago tampoco están, así que está más que claro que hay algunas irregularidades, que tendrán que dar algunas explicaciones porque es plata de todos los pinamarenses y de los argentinos.
–¿Quién falló en la certificación de la obra?
–El Estado tiene herramientas para controlar la obra pública entendiendo que la transferencia de fondos nacionales son fondos de todos los ciudadanos de la República Argentina, entendiendo que el Estado nacional tiene que tener sus herramientas para que el Municipio haga las cosas bien. Hay una responsabilidad compartida, si esto llegara a tener la película que nosotros estamos viendo, que es una subejecución de partida, o como se le quiera llamar, que tiene que ver con que no llegue a la obra el caudal de plata que se ha transferido al Municipio para que se haga esa obra; se genera una obra de menor calidad por no utilizar probablemente los fondos de manera efectiva para tener una obra de calidad.
–¿Qué obró de disparador de este proceso?
–Cuando la gente empezó a ver la cantidad de plata que decía el cartel de obra, la fecha de finalización, o cuando empezó a ver la pérgola que después sacaron para volver a construirla, empezó a reclamar y a pedirnos que sigamos esas obras, que no podía ser que hubiera esa inversión en esos lugares, y así fue que nos pusimos a trabajar con todo el equipo.
–Previamente, ¿hubo alguna instancia de dialogo con el Ejecutivo?
–El diálogo que nosotros tuvimos con el Ejecutivo fue el estado del expediente y después el tiempo de ejecución de la obra esperando que subsane, yendo a la obra, estando ahí presente, revisándola, viendo cómo avanzaba. Estuvimos charlando con el representante de la empresa varias veces para ver cómo iban, así que el diálogo es con el expediente y con el tiempo. Revisamos hasta un punto y, bueno, hasta que nos dijimos “ya está”.
–¿Cómo aparece a figura del diputado Tailhade?
–Cuando nosotros empezamos a analizar esto, vimos que el recurso viene de un fondo de planificación de Nación y esto tiene que ver con la Justicia Federal. Nosotros no podíamos encauzar esto a nivel municipal porque son fondos nacionales. Entonces, el cauce del reclamo tenía que ser en sede federal. Consultamos a diputados provinciales y nacionales hasta que llegamos a Rodolfo Tailhade, quien se puso a disposición para indicarnos el camino. El expediente es el que habla por sí mismo. Creo que esperamos lo suficiente y esperamos todas las instancias.
NOTAS RELACIONADAS: "“Somos una generación que va a sacar adelante a Pinamar”" Y "Denunciaron penalmente al intendente de Pinamar"