Dentro del entramado político de Cambiemos, la figura del jefe de Gabinete cobra singular importancia por ser uno de los pocos funcionarios (sino el único) que salen al cruce de acusaciones, imputaciones y temas conflictivos. Para colmo, la reciente denuncia del presidente del bloque de Unidad Ciudadana, Gregorio Estanga, es radicada en un momento en que el intendente se encuentra de vacaciones. Panzieri desmiente el fundamento de la denuncia y explica.

–Como se dice habitualmente, en estos casos, ¿están a la espera de lo que decida la Justicia?
–Nosotros consideramos que nadie está por encima de la Justicia y no como gobiernos anteriores que se creían por encima y trataban de destruirla o vapulearla. En este caso, el intendente y su equipo siempre están a disposición de la Justicia para dar las explicaciones que sean necesarias, pero lo más importante hoy es decirle al vecino que esta obra y todas las que hacemos son totalmente regulares, transparentes, se someten a procesos públicos y abiertos de licitación. Nunca hubo tantos oferentes de obra pública en Pinamar y es porque vieron que la lógica de asignar obras entre amigos cambió. El nivel de obra y la cantidad molestan y mucho. Creemos que ésta es una maniobra política para deslegitimar a Martín [Yeza] y su equipo y sabemos que es una herramienta de la vieja política que todavía no quiere irse de Pinamar, que a través de la falsa denuncia y de crear cuestiones donde no las hay intentan traer la inestabilidad a Pinamar porque eso es negocio para ellos. Que se hayan ordenado los números les molesta y lo reconocen en el decreto donde rechazan la rendición de cuentas (“las cuentas están mejor”), con lo cual uno sabe en el marco de qué proceso se da esta denuncia y las que van a seguir haciendo porque a Pinamar lo estamos sacando adelante. Somos una generación que va a cambiar Pinamar porque somos de Pinamar, porque vivimos en Pinamar, porque vivimos lo mal que le hizo la corrupción a Pinamar y estamos totalmente decididos a dar vuelta la página en la historia de Pinamar.

–Pero es obvio que habrá que rendir cuentas, dar explicaciones…
–En cuanto a la denuncia en sí, la vamos a responder, se van a presentar todas las respuestas que sean necesarias a la Justicia. Es una obra compleja, en tres frentes distintos, que son Bunge y Avenida del Mar, Bunge y Marco Polo, las dársenas en Bunge entre Avenida del Mar y Burriquetas. Es una obra que no está terminada, por la que la Municipalidad no ha pagado la totalidad. Hay un montón de órdenes de servicio donde se le pide a la empresa que cambie cosas que había colocado, que reconstruya algo que había construido porque no estaba de acuerdo al objetivo que se había pautado en el plan de trabajo. Ésa es la manera en que nosotros trabajamos, la que a muchos les molesta, que a algunas empresas incomoda también o, en realidad, las empresas dicen: “Un gobierno nunca me exigió que rehiciera algo que ya estaba puesto y hecho”. Y las pérgolas se desarmaron y se volvieron a poner. Hay articulados que se sacaron y se volvieron a poner porque no estaban bien colocados y la inspección de obra lo notó, pidió que se cambiara y sencillamente se cambió. Es importante que los vecinos sepan que todo lo actuado está volcado en los expedientes, que cuando dicen que la obra estaba pagada en un 75% y no estaba hecha es falso. La obra el 22 de diciembre estaba certificada en un 69% real.

–¿Planeamiento certifica en estos casos?
–Sí, certifica a través de inspectores de obra que se contratan y se designan como tales y pasan a ser la autoridad máxima. Es quien tiene el poder de negociar en obra con una empresa cambios de una cosa por otra, porque cuando nosotros licitamos por ajuste alzado puede haber cambios durante la ejecución de la obra que no implican un cambio en el monto global de la obra porque para esto tendría que cambiar sustancialmente la obra.

–Unidad Ciudadana hace hincapié en aspectos puntuales de la obra.
–Una de las cosas que denuncian es que se puso un pasto más barato en lugar del más caro; hacen la cuenta sencilla y dicen: “Entonces, acá falta tanta plata”. Esa cuenta, realizada con ánimo malicioso, con la idea de dañar, desinformar al vecino sobre la manera que se gasta el dinero, no tiene en cuenta que se colocaron 1300 metros cuadrados que no estaban en ningún cómputo en la zona de Marco Polo y Bunge, donde se decidió cambiar el pasto en lugar de poner tanta piedra, que es más barata que el pasto. Van ítem por ítem tratando de confundir a las personas. Obviamente, consideramos que esto en una instancia judicial no va a tener ningún tipo de peso porque las respuestas van a salir del expediente. Prácticamente, no tiene que sentarse nadie a declarar para que quien reciba la denuncia pueda ver que los elementos que están dentro de ella son falsos o están orientados a confundir. Si voy ítem por ítem, dice que se pagaron las 77 luminarias que dice el pliego. Es todo orientativo en un pliego que se contrata por ajuste alzado porque el objetivo es la realización de la obra. Si entre la empresa y la inspección decidieran que en vez de 77 tuviera que haber 88, la empresa debe colocarlas y no va a recibir ningún adicional por eso, y la diferencia de luminarias va a estar compensada por menos metros cúbicos de piedra que no va a perjudicar porque coloqué más pasto en otro sector, porque el objetivo es realizar la obra. Nosotros venimos trabajando de una manera muy seria la obra pública. Ha pasado en Av. Central, donde se había abierto al público, luego se encontraron defectos, porque tuvo un uso muy intenso, se cerró la plaza y muchas cosas se volvieron a hacer y colocar. La gente de la oposición ha llegado a decir que nosotros estábamos pagando dos veces la obra.

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