Como determinado por el principio de acción y reacción, tras el brote inflacionario, llegan los pedidos de mejoras salariales. En este caso son los trabajadores municipales los que bregan por mantener el poder adquisitivo. Ya vienen de varias conversaciones y por ahora no hay ni miras de solución a un conflicto que, de no mediar la cordura, terminará en un cese de actividades como medida de fuerza, tal cual ocurre habitualmente en este tipo de situaciones. Mientras tanto, las ofertas del Ejecutivo no se acercan a lo solicitado por su personal a través del Sindicato de Trabajadores Municipales de Pinamar (STMP).

El secretario de prensa de la agrupación gremial, Enrique Giménez, explica la situación, que sufriría variantes tras la asamblea (prevista para luego de ocurrido el cierre de esta edición): “Nosotros estamos sujetos a la asamblea pero de por sí ya le planteamos una negativa, en el cuerpo de delegados y en comisión: que la oferta del Ejecutivo no alcanza porque es algo que está estirado en el tiempo, o sea, significa que terminaríamos de cobrar en abril de 2018. El año pasado tuvimos una inflación cercana al 45% y nosotros una paritaria cercana al 40. Tenemos 5 puntos abajo. Este año comenzó con una propuesta del 18%. Nosotros, después de dos o tres reuniones, logramos romper ese porcentaje y nos hacen una oferta del 23%, pero la última cuota sería cobrada en abril de 2018, lo cual no cierra”.

Mientras tanto, paralelamente, el gremio de los docentes trata de presionar para destrabar su conflicto sin arriar sus banderas. Para Giménez, los docentes son la punta de lanza y por ese motivo hay un ataque por parte del gobierno nacional y el provincial en contra de su dirigencia “porque, si ellos logran romper la propuesta de salario que hacen los ejecutivos, eso nos da la posibilidad al resto de los trabajadores de que se levante ese techo de paritaria, porque acá tenemos una discusión importante. En este marco, con la propuesta cerrada del Ejecutivo, la paritaria sería un discurso totalmente vacío de contenido”.

El vocero del STMP recuerda que durante 2016 hubo una paritaria que, aunque fue semestral, les permitió acceder al 40% “y, si bien no tuvimos un monto cerrado, tuvimos cuota para tener un bono, porque podríamos haber tenido un bono de fin de año de un solo monto pero nosotros preferimos tener montos de septiembre a diciembre de 1050 pesos”.

Más allá de las cifras, la propuesta del Ejecutivo no cierra en el tiempo, en el plazo, queda fuera de término. Por ese motivo los trabajadores pensaron en que se debía consultar a las bases y qué mejor que hacerlo en asamblea.

“La proyección es así: un 7,72% para abril; un 4,56% para agosto; un 4,56% para diciembre; y un 4,56% para abril. En el acumulativo, eso cierra en un 23,13%, un monto de 3400 pesos. Lo que no nos cierra es el tiempo. Vamos a ir a la asamblea y vamos a ver qué surge. Es esa propuesta más el comentario de la cláusula gatillo que en estos periodos de incertidumbre es bueno, pero el planteo que hacemos es que necesitamos afrontar los aumentos que se dieron a fines del año pasado y principios de este, para la canasta escolar, lo que va a ser el aumento de las energías y por lo tanto no nos cierra el escalonado. Es preferible tener una paritaria semestral o que ese 23% sea para ahora. Veremos cómo se plantea la asamblea y nosotros el lunes 13 de marzo tenemos una audiencia en el ministerio y ahí iremos con el mandato de la asamblea. Todos los beneficios que tienen los trabajadores, ocho horas de trabajo, vacaciones y aguinaldo, siempre se consiguieron con la protesta y la movilización en la calle; si uno se queda, acepta lo que el empleador le impone y lamentablemente los que nos gobiernan quieren que no nos quejemos. Así que tenemos ese desafío por delante”.