“No es correr detrás de un nombre”

El Movimiento Evita se presentará como otra opción justicialista en las próximas PASO. La meta de quien lidera esta tendencia, Adriana Meneghetti, es la unidad, y basa sus posibilidades en la coherencia vista en toda su trayectoria.

Adriana Meneghetti, referente del Movimiento Evita, cuenta con la particularidad de que su militancia no sólo se evidencia durante las campañas electorales sino también alejada de esos tiempos, dada la actividad social que despliega y que es una causa de su crecimiento político.

La dirigente entiende que ello se motiva por la coherencia, las decisiones que se toman y los roles que se asumen.

“Como parte del Movimiento Evita, en un momento decidimos que teníamos que estar en lo que sería la organización popular trabajando con nuestros compañeros más del barrio porque veíamos que era necesario desarrollar trabajo, que ello se hiciera dentro de una organización pero en este momento, que hemos tomado la decisión de participar más en lo político saliendo más de lo reivindicativo, suceden otras cosas y uno está en otros ámbitos. Se habla de otros temas y salimos de lo que sería el merendero, la huerta, que también lo seguimos haciendo. Salimos de ahí y nos posicionamos para dar la discusión política y, además, en cierta manera, lo exigimos. Nosotros queremos estar en la discusión política, si no, siempre estamos en la periferia y estando en la periferia son otros los que toman las decisiones por nosotros”, describe.

Meneghetti considera que varias estructuras van a tener que moverse si, como entiende, es necesario ejercer la defensa de los derechos y hacer cuestionamientos al poder preestablecido. “Adentro del peronismo hay que dar esa disputa”, asegura.

“Es un juego dialéctico, hasta que con el paso de los días se va a ir modificando, más rápido que tarde. Éste tiene que ser el momento del peronismo porque la gente, los vecinos, nuestros compañeros y compañeras no pueden esperar más. Es un momento en que el justicialismo debería poder conformar un gran frente popular donde estemos todos, donde se incluyan las mayorías, porque no sirve una unidad chiquita. Incluso no sirven precandidaturas aisladas si eso no puede conformar un gran frente popular que pueda transformar la realidad de las personas. Cuando yo digo que es el gran momento del justicialismo es porque no lo puede hacer otro espacio político”, infiere.

Tal como los ven propios y ajenos al movimiento, la referente coincide en que el justicialismo de los últimos años ha dejado mucha energía, mucho esfuerzo, en el camino en busca de la unidad. A raíz de ello, recuerda la visita de Leonardo Grosso, diputado nacional de la agrupación, que señaló en la ocasión que venía “a construir la unidad con todos los espacios que están en la oposición”.

Parte del éxito en la futura contienda electoral tiene que ver con el autoanálisis. En todo orden es necesario tener conciencia acerca de nuestras potencialidades: “Me parece que hay que ser humilde, analizar qué es lo que necesita la comunidad y ver lo que uno dio y lo que puede dar y pensar que es con el otro, dejar de lado los personalismos. Cuando, hace dos meses, dije que no era correr detrás de un nombre, a los dos días empezaron a surgir los nombres y ello ocurre porque a todos nos lleva diferente tiempo darnos cuenta de lo que pasa. Hay que despabilarse un poco porque, mientras nosotros estamos pensando qué somos capaces de hacer o cuáles son nuestras potencialidades, la gente está pasando hambre, están cerrando los negocios, las tarifas están cada vez más altas y más impagables”.

Meneghetti no deja de lado que cada vez son más los que resuelven el día a día no sin cierta zozobra. La necesidad básica del “qué comemos” se multiplica y profundiza. En muchos casos, asegura que la cena hace años que no existe para mucha gente. A raíz de esto hay más merenderos de otros movimientos sociales, de las iglesias, y el papel de las escuelas que dan de comer ha crecido de manera sustancial, asegura.

“Yo ya manifesté mi deseo de ser precandidato a intendente y desde hace rato dije como había que construir la unidad, que debemos hacerlo entre todos y que debe ser inclusiva. Hay compañeros que ya lanzaron su precandidatura y la dieron como cerrada, y no me cierro a nada. Me parece que si lo cerramos perdemos y nosotros tenemos que ganar de manera contundente. Seguimos conversando, reuniéndonos con todos los compañeros. Hay como una idea de unidad pero hay que seguir trabajando…”, concluye.