"El invierno fue muy duro y para octubre no hay reservas. Hay hoteles que no van a abrir", afirmó, reflejando la gravedad del problema. Según Baldini, esta es "la peor temporada de los últimos 20 años en Pinamar".

La crisis económica afectó al turismo en todo el país, especialmente en destinos de nieve durante el invierno, y parece que también afectará al verano. Los números son preocupantes: la temporada pasada ya mostró una caída entre el 15 y 20% en enero y del 50% en febrero, y no hay señales de que la situación vaya a mejorar.

Baldini, que lleva en la industria desde 2001, nunca había visto "una demanda tan baja como la de ahora". "La gente no piensa en las vacaciones, el rubro esparcimiento está puesto a un costado", dijo, explicando que las personas están priorizando otras necesidades básicas.

Ante la pregunta de cómo van a sobrevivir los empresarios turísticos, Baldini respondió: "Algunos vamos a poder mantenernos, pero el problema es la mano de obra; va a haber una reducción de puestos de trabajo".

Sobre la acción del municipio, Baldini destacó que es necesario un plan de marketing para que Pinamar no desaparezca del mapa turístico. "Si el equipo municipal acompaña, intentaremos tener presencia en los mercados", dijo, pero también señaló que las tasas municipales, que aumentan todos los meses, complican aún más la situación para el sector.

El panorama es difícil. Baldini describió un sentimiento de resignación en la gente, que "no les alcanza para comer, viajar, pagar sus costos de vida". Criticó al gobierno nacional por la falta de apoyo a los trabajadores y la clase media, afirmando que "siempre se corta por el hilo más delgado".

A pesar de todo, Baldini espera que se pueda generar algo de demanda para la próxima temporada, aunque muchos empresarios no esperan ganar dinero. "Una posibilidad es ajustar por precio, pero creo que muchos no vamos a ganar plata esta temporada; podremos mantener las fuentes de trabajo y creo que esa va a ser la constante".

Octubre en el radar

Para octubre, las expectativas son muy bajas. "Tengo una sola reserva para octubre, hay hoteleros que no van a abrir", confesó Baldini. Explicó que el público que suele visitar Pinamar, que suele tener un poder adquisitivo alto, ahora prefiere destinos internacionales como Brasil o Miami. Además, la clase media que solía visitar Pinamar los fines de semana ya no puede hacerlo por la situación económica.

Desde la Cámara de Turismo, están apoyando los proyectos del secretario de Turismo para dar visibilidad a Pinamar y promocionarlo lo más posible. "Si no promocionamos nada, la temporada va a ser peor", concluyó Baldini.

Foto ilustrativa archivo Prensa Pinamar